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Bahamas retornó este jueves a Cuba por vía aérea a un total de 128 migrantes irregulares; grupo integrado por 106 hombres, 20 mujeres y dos menores de edad.
Con esta operación de retorno -la octava desde Bahamas- ya suman 459 los cubanos retornados desde ese territorio en lo que va de año, según precisó la prensa oficialista cubana citando como fuente datos del Ministerio del Interior (MININT).
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Según el reporte oficial, uno de los retornados "fue trasladado a los órganos de investigación por encontrarse como presunto comisor de hechos delictivos de gravedad que estaban siendo investigados antes de involucrarse en la salida ilegal".
Un total de 2,601 migrantes irregulares han sido retornados a Cuba en 41 operaciones este 2023 desde varios países de la región con los que la isla tiene suscritos acuerdos migratorios.
El Ministerio del Interior no ha precisado cuántos cubanos permanecen todavía recluidos en Bahamas tras las 459 repatriaciones efectuadas.
En los últimos meses han sido múltiples las denuncias sobre las deplorables condiciones en que estarían recluidos migrantes cubanos en un centro de detención de Nassau, capital de Bahamas.
Desde Cuba sus familiares han pedido de forma reiterada que los cubanos que permanecen allí, muchos de ellos necesitados incluso de atención médica, sean repatriados cuanto antes.
Las quejas por las condiciones en que subsisten los migrantes retenidos en Bahamas se remontan a varios meses atrás.
En diciembre circularon en redes sociales un par de cartas, escritas presuntamente por balseros cubanos presos en Bahamas, que movilizaron la inquietud de las familias hasta llevarlas a organizarse para reclamar a las autoridades de Bahamas una respuesta.
Las misivas en cuestión estaban escritas a mano y en ellas se leía el testimonio de dos balseros encarcelados en Nassau que pedían auxilio por estar siendo tratados como "perros salvajes".
En enero, Carlos Ramírez, un balsero deportado a Cuba que estuvo detenido junto a su esposa y otros migrantes en la capital de Bahamas, dijo que preferiría haberse ahogado en el mar antes de sufrir los graves maltratos a los que dijo haber estado sometido en el centro de inmigración bahamense durante tres meses.
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