Vídeos relacionados:
Los Obispos Católicos de Cuba recordaron las palabras del Papa Francisco sobre los hechos más recientes ocurridos en Nicaragua y pidieron a los cubanos orar “por esa Iglesia y pueblo que sufren”.
“A la Virgen Santísima, tan amada por nicaragüenses y cubanos, suplicamos su intercesión para que nuestros pueblos puedan transitar por sendas de paz y de acogida respetuosa de todos”, se lee en el comunicado de la iglesia católica cubana.
Lo más leído hoy:
Los obispos aludieron a las palabras del Papa, quien dijo en el Angelus del domingo pasado que rezaba por el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, condenado a 26 años de cárcel, y por los 222 desterrados por el régimen de Nicaragua.
A partir de aquí, los obispos cubanos dijeron sentirse “profundamente unidos a los Obispos y a todos los fieles de la Iglesia de Dios en Nicaragua” y acoger esa invitación del Papa a la oración.
Los religiosos recordarán especialmente a los perseguidos políticos nicaragüenses durante “las misas y sacrificios que ofreceremos el próximo Miércoles de Ceniza (22 de febrero) y también durante el ejercicio del Vía Crucis que habitualmente hacemos los viernes del tiempo santo de la Cuaresma”.
El pasado domingo, el Papa Francisco había expresado públicamente su dolor ante las noticias que llegaban de Nicaragua.
“Las noticias que llegan de Nicaragua me han producido no poco dolor. No puedo dejar de recordar con preocupación al obispo de Matagalpa, Mons. Rolando Álvarez, a quien quiero mucho, condenado a 26 años de cárcel, y a las personas que han sido deportadas a USA. Rezo por ellos y por todos los que sufren en ese querido país”, apuntó el Sumo Pontífice de la Iglesia Católica desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico del Vaticano.
Francisco también dijo que rezaba por la intercesión de la Virgen Inmaculada, para “que abra el corazón de los responsables políticos y de todos los ciudadanos a la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor, y se alcanza mediante el ejercicio paciente del diálogo”.
A inicios de febrero, el régimen de Daniel Ortega deportó de manera unilateral a 222 prisioneros políticos hacia Estados Unidos.
La decisión fue informada públicamente por el juez nicaragüense Octavio Rothschuh, quien dijo ante la televisión oficialista que “se ordenó la deportación de 222 personas” que fueron declaradas “traidores a la patria” e “inhabilitadas de por vida para ejercer cargos públicos”.
Sin embargo, uno de estos presos, el Monseñor Rolando Álvarez, Obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí, fue condenado a 26 años y cuatro meses de prisión, luego de negarse a tomar el avión con los demás deportados.
Al eclesiástico se le condenó bajo los cargos de conspiración, propagación de noticias falsas, obstrucción de funciones agravadas y desacato a las autoridades.
El obispo de Matagalpa se encontraba detenido por las autoridades desde el 19 de agosto de 2022 en arresto domiciliario, y desde el 9 de febrero está en la cárcel La Modelo de Tipitapa.
Archivado en: