Los padres de un niño cubano pidieron facilitar la rehabilitación para el pequeño, que quedó con impedimento físico por una negligencia médica después de someterse a operaciones por neurofibromas.
Tristán, discapacitado por una negligencia causada después de dos operaciones de neurofibromas intraventriculares, por la cual tuvo una afectación que lo llevó a más cirugías, no puede acceder a rehabilitación en el Centro Internacional de Restauración Neurológica (CIREN), en La Habana, porque se la han negado, según expresó su madre, Mia Rosa, en un video transmitido en Facebook este martes.
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"Necesito, por favor, que mi hijo sea rehabilitado cuanto antes. Ya va para 11 años y comenzó con ochos. Mi hijo tiene derecho como todos los niños del mundo a una rehabilitación, a una compensación de medicamentos, a un seguimiento neurológico, a un equipo multidisciplinario, a un estudio genético, pero aquí no lo va a tener", dijo entre lágrimas la mujer.
El director del CIREN le negó la rehabilitación porque le exigían que permaneciera internado y la madre, que tiene otros dos hijos, pidió que fuera ambulatoria. Después de largas conversaciones para resolver una cama en la cual garantizarle el tratamiento y una dilatación del caso que duró varios meses, el funcionario le dijo que no había cama, aun cuando le prometió previamente que le guardarían una.
Según le respondió el hombre, "por la situación epidemiológica" la rehabilitación no podía ser ambulatoria, después de la larga espera, y concluyó diciéndole a la madre que entonces por ahora no se le podía hacer el tratamiento.
En su desesperación, la mujer logró que una persona comenzara la rehabilitación pero la delicada salud del niño obliga a que se haga dentro de un hospital.
El pequeño Tristán necesita, además, una válvula peritoneal que hace dos años no entra a Cuba, según explicó anteriormente Mia Rosa en un video, y aunque encontraron un patrocinador para hacer los trámites y viajar a Estados Unidos con el niño, el acta de nacimiento de la madre tiene un error y necesita subsanarlo con la de su madre, pero el documento está en Granma y el proceso demora.
Amigos y conocidos de los padres pidieron en las redes la ayuda para Tristán, pues el infante no puede rehabilitarse en otro lado que no sea un hospital porque requiere de un equipo multidisciplinario por su delicado estado de salud.
"He sido parte del sufrimiento de esta amiga del alma con su hijo Tristán. Un niño que vi reír, jugar, bromear, y ahora está completamente impedido en un sillón por una negligencia médica que lo llevó a operaciones muy severas en su cerebro", expresó en un post el actor Ernesto Tamayo y pidió la ayuda de los cubanos para su caso se difunda en las redes.
Mia Rosa y su esposo no son los únicos padres que claman por auxilio en las redes en medio de una grave crisis en el sistema sanitario cubano.
Otros padres han acudido a las redes como último recurso para lograr encontrar una vía para atender a sus hijos y muchos han optado por someterlos a tratamiento en otros países.
Otra madre estalló en las redes recientemente luego de presenciar la pésima atención que recibió con su bebé de poco más de un año en varios hospitales de La Habana, a los que acudió desesperada por una rara enfermedad que presentaba el niño.
Rosanne Castro contó que en acudió varios centros en repetidas ocasiones porque el niño llevaba 40° de fiebre con cambio de coloración en los pies, las manos y los labios, y nadie lo dejaba en observación.
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