Una dirigente comunista de base incendió recientemente el hospital habanero Julio Trigo, poniendo como ejemplo de orgullo patriótico a los nazis; en otra muestra del atolondramiento e incultura que padece el único partido legal en Cuba.
(...) "Los nazis se orgullecían de ser alemanes, ustedes se tienen que orgullecer de ser cubanos".
La Frauenschaft cubana, que las crónicas no identifican, -viendo la muda reacción de la masa ante vivas Fidel y las notas del Himno Nacional- subió a la tribuna y gritó ¡Suástica pató el mundo, aquí!
El repentino ataque ário debe ser investigado por un equipo multidisciplinario, que determine cómo una comunista de Arroyo Naranjo pudo montar el muerto de Alfred Rosenberg, ideólogo nazi y autor de la teoría racial hitleriana; teniendo el cuidado de no caer en la tentación comparar el cierre de La historia me absolverá con el Mein Kapf, porque se buscarían problemas.
Hollywood tiene en la Frauenschaft de la Calzada de Bejucal la heroína ideal para una saga de comunistas nazificados, a base de Chispaetren y Moringa. Aunque no contenta con el estruendo germanófilo, ya deshecha en el pomo de Ronda que están vendiendo por la Libreta de racionamiento, dibujó un enigma de Inteligencia Artificial: Al que tiene millones cuando se le escapa, se va. Y al que no tiene nada, cuando se va, se va...
Obviamente, el abuso de la frase se va será analizado por los trincas de la Contrainteligencia Militar; porque no se trata de un símil jonronero, pues fue antecedido de las palabras millones y escapa; que forman parte del contemporáneo imaginario poético cubiche.
La Tula del Julio Trigo tuvo un antecedente directo en un combativo dirigente del entonces seccional del partido en el barrio de Príncipe que, emocionado por la presencia del comandante en jefe en un acto para reclamar a Estados Unidos la liberación de pescadores secuestrados por grupos opositores de Miami y bajo los efectos del vino argelino Pancho, el bravo, soltó:
Nos acusan, a nosotros, de comunistas; ¡comunistas son ellos que asesinan y violan a mujeres, niños y ancianos en Vietnam!
Un combatiente del Ejército Rebelde, nombrado administrador de una vaquería lechera, cambió la música indirecta prevista para la hora del ordeño, por casetes con boleros de Orlando Contreras; asi que aquellas vacas fueron ordeñadas durante varios meses, al ritmo de Amigo, de qué, Muerto en vida o Mi corazonada.
Cuando aún funcionaban las Posadas, el entonces DOR de Santiago de Cuba siempre acertaba con el eslogan elegido para una valla colocada frente al motel de la carretera del Morro, donde quienes acudían a matar la jugada, siempre leían: ¡Aquí no se rinde nadie!, ¡Hacer más con menos! o ¡Listos para la producción y la defensa!
Frente a la Escuela de Letras de la Universidad de La Habana y el fondo del Castillo del Príncipe, el DOR colocó una frase martiana: La pobreza pasa, la deshonra no. Y un borracho acudía cada tarde al pie de la valla y exclamaba: ¡Coñó, tremenda pobreza; tremenda deshonra!
Luis Mas Martín, combatiente rebelde y director de Radio Rebelde, vivió uno de sus peores momentos el 26 de julio de 1970; cuando tras la autocrítica de Fidel Castro por el fiasco de los diez millones, la emisora radió Timba cayó en la trampa; cayó en la trampa y no puede salir...
La cochambre ideológica y cultural impuesta por el comunismo de compadres, provoca esperpentos como esa inútil dirigente comunista; alabando a los nazis, por su orgullo nacionalista y excluyente; cuando la patria es la infancia, el barrio y aquellas butifarras del Congo de Catalina de Güines; orgullecido porque las suyas, eran las más ricas y sabrosas que yo en mi Cuba he comido.
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