Familias que perdieron todos sus bienes materiales en el incendio en Matanzas continúan evacuados y ven cada vez con mayor incertidumbre su futuro.
Muchos de estos residentes en la zona cercana al siniestro expresaron a Radio Televisión Martí su preocupación ante la falta de respuesta de funcionarios del gobierno provincial sobre su situación.
“No sé qué van a hacer con nosotros, porque ahorita empieza el curso escolar aquí. Mi ropa también se quemó, con zapato y todo… Estoy aquí con un par de chancletas nada más, que era las que tenía puestas cuando empezó el incendio. Dicen ellos que van a resolver el problema, pero hasta ahora, nada. Estamos aquí en stand by”, dijo una mujer que se identificó como Lucía a Radio Televisión Martí.
Ella está en la misma situación que una veintena de familias que vivían en un albergue temporal próximo al lugar del siniestro y fueron evacuados en la Escuela Formadora de Maestros “René Fraga Moreno”, en la ciudad de Matanzas.
En el lugar permanecen cerca de 260 personas que vivían en el Reparto Dubrocq y la Zona Industrial.
La atención a los evacuados en ese centro educacional ha sido buena, aunque algunos comentan que en los últimos días ha empezado a decaer.
“Al principio el trato sí era muy bueno. Ahora se han ido saltando, por ejemplo, las meriendas. Ya las quitaron. Ahora es solo desayuno, almuerzo y comida. Imagínate a personas como nosotros, que lo perdimos todo, que no tenemos una cartera, que no tenemos un dinero, ¿qué podemos comprar fuera de lo que nos dan aquí? Nada”, comentó Michael Rodríguez, quien también lo perdió todo en el incendio.
Rodríguez vivía con su esposa y sus hijos, de 11 y 14 años, en el albergue situado a escasos metros de una tubería que llevaba el combustible hacia los tanques de almacenamiento.
Estaba en ese lugar desde 2014, cuando su casa se derrumbó en el reparto Versalles, a consecuencia de intensas lluvias.
Este hombre precisa que la única indicación que han recibido de las autoridades es que tienen que esperar, “que no hay solución en estos momentos” para su problema.
“Es una situación a gran escala, dicen ellos, que demora”, asegura.
El hombre salió corriendo del lugar con su familia, cuando se percató que el incendio se desataba. Ahora afirma que él y sus hijos no tienen siquiera zapatos que ponerse.
“Para mis hijos tampoco ha llegado nada, porque no llegan cosas de donaciones (…) pero estoy agradecido de todas formas de que seguimos vivos”, explica.
Rodríguez afirma que las autoridades están pintando y pretenden entregar las viviendas que quedaron en pie tras el incendio, en las proximidades de la zona industrial.
“Están pintando las fachadas de las casas que quedaron, y la gente está dando bateo porque dicen que las paredes están calcinadas y que tienen miedo entrar a sus hogares. Pero el gobierno los va a ubicar ahí otra vez. Si a mí, que acaban de demoler mi vivienda, me están diciendo que lo mío demora, que quedará para los demás”, considera.
Según las autoridades matanceras, este jueves debe comenzar la entrega de recursos a las seis familias que perdieron sus pertenencias con el incendio, entre ellos camas, colchones y electrodomésticos.
El gobernador de Matanzas, Mario Sabines Lorenzo, dijo que han llegado nueve cargamentos de donaciones a Matanzas, procedentes de varias partes del mundo y otros están en trámites, fundamentalmente de medicamentos.
El incendio desatado el viernes 5 de agosto en la zona industrial de Matanzas dejó un saldo de 132 lesionados, de los cuales, dos fallecieron, 17 siguen hospitalizados y 113 recibieron el alta. Otras 14 personas, la mayoría bomberos, se dieron por desaparecidas, sus restos fueron recolectados, pero finalmente no podrán ser identificados.
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