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Una nueva explosión en los depósitos de diésel, que alimentan los grupos electrógenos de la Base de supertanqueros de Matanzas, provocó siete heridos, entre ellos varios técnicos extranjeros, dijo a CiberCuba un jefe de compañía de bomberos presente en el siniestro; sin poder precisar la cifra de nacionales y foráneos lesionados.
Los depósitos se incendiaron porque el petróleo que mana de los tanques 2 y 3, superó las barreras físicas que los separaban y provocó el estallido de los tanques diésel que alimentan a dieciséis grupos electrógenos de la Empresa de Grupos Electrógenos y de Servicios Eléctricos (Geysel), precisó la fuente.
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Hasta el momento, el gobierno cubano no ha informado sobre la nueva explosión en la Base de supertanqueros de Matanzas ni los bomberos pudieron explicar por qué el sistema de alimentación de los grupos electrógenos seguía funcionando.
Los bomberos trabajan en bajar la temperatura de los cuatros tanques afectados por el incendio principal; de los que han colapsado tres, y se trabaja para evitar que el fuego llegue a la terminal de combustibles blancos (gasolina,y querosenos) situados en las cercanías y, que de incendiarse, multiplicarían el peligro y retrasarían la extinción, explicó, en una comparecencia televisada, el teniente coronel Alexander Ávalos Jorge, segundo Jefe del Departamento Nacional de Extinción del Cuerpo de Bomberos de Cuba.
Con los siete heridos de este lunes, la cifra de víctimas se eleva a un fallecido, 15 desaparecidos y 132 heridos; según cifras oficiales, a falta de determinar cuántos de los nuevos lesionados permanecerán hospitalizados. Hasta el reciente siniestro, 24 cubanos permanecían ingresados, con diferentes estados de gravedad.
Entre la noche del domingo, la madrugada y tarde del lunes, el voraz incendio se descontroló, creando situaciones críticas para bomberos y rescatistas y densas nubes de gases tóxicos sobre Matanzas, Mayabeque y La Habana.
El incendio, que el gobierno cubano atribuyó a la caída de un rayo con potencia superior a la asimilable por el sistema de protección contra descargas eléctricas, dura ya 72 horas, al cierre de esta nota.
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