Más de tres mil migrantes irrumpieron la aduana de Cerro Gordo, en Huixtla, Chiapas, cansados de esperar una prometida Forma Migratoria Múltiple (FMM) que les permite avanzar hacia la frontera norte de México, tras salir en caravana desde Tapachula, según reportes de medios locales.
La caravana de migrantes, en la que también viajan cubanos, rompió el cerco de seguridad de la Guardia Nacional y Policía Militar en la referida aduana del Instituto Nacional de Migración (INM), donde esperaban sin ser atendidos por más de 24 horas, refiere un reporte de este miércoles del medio local Diario del Sur.
Según el citado medio, poco después del mediodía de este miércoles los migrantes se enfrentaron a las autoridades para lograr entrar por la fuerza a las oficinas del INM en Huixtla, donde rompieron ventanas durante sus exigencias de ser atendidos.
¡Queremos los permisos!, ¡Queremos los permisos!", demandaron a gritos los migrantes irregulares al ingresar a la oficina y luego bloqueraron cuatro carriles de la carretera Huixtla-Villa Comaltitlán.
Allí, refiere el medio mexicano, los migrantes advirtieron que se quedarían hasta ser atendidos y se les otorgue el documento, para que puedan avanzar hacia la frontera norte.
El bloqueo de la carretera ha generado molestias y discusiones de los conductores con los migrantes, tras crecer la desesperación por no poder avanzar en el camino.
También los usuarios de medios transporte público se quejaron por tener que caminar para poder trasbordar y por la inanición del gobierno para encontrar una solución a este conflicto.
Los migrantes invadieron la oficina tras conocer el personal del INM había suspendido la atención a ellos y comenzaron a subirlos en autobuses para regresarlos a la ciudad de Tapachula, desde donde habían salido caminando este lunes.
La medida provocó la ira de los migrantes quienes de inmediato cumplieron su palabra de protestar e iniciar un bloqueo carretero como forma de presión para las autoridades del INM.
Los migrantes argumentaron, además, que ya habían caminado más de 40 kilómetros bajo el fuerte sol, calor y con niños en brazos para que les negaran ser atendidos y sobre todo los regresaran a Tapachula donde no reciben atención desde hace meses.
Asimismo, alegaron que ellos no buscan quedarse en Chiapas, que solo quieren que les entreguen sus FMM para avanzar por sus propios medios hacia el norte del país y en busca de su sueño americano, ya que no tienen como opción regresar a sus países.
Este martes, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de México pidió a las autoridades garantizar la atención humanitaria de urgencia a los migrantes que iniciaron esta caravana, de la que forman parte cubanos.
La CNDH solicitó la implementación de una serie de medidas cautelares tras la salida de la caravana de desde Tapachula, además de solicitar coordinación de esfuerzos entre el INM, a la Guardia Nacional, a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), al Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), a las secretarías General de Gobierno de Chiapas, de Salud, de Seguridad y Protección Ciudadana del estado, así como a la presidencia municipal de Tapachula ante la posible salida de la caravana de migrantes.
El organismo apunto que en la caravana viajan más de 3,700 personas originarias de Cuba, Venezuela, Haití, Colombia, República Dominicana, Panamá, Ecuador, Guatemala, Nicaragua, Paraguay y algunos países asiáticos. Muchos forman parte de grupos vulnerables, como embarazadas y niños.
También dijeron que esta caravana partió de Tapachula por la falta de atención por parte del INM y la COMAR.
La mayoría de estos migrantes “ha esperado entre tres y cuatro meses la resolución de trámites migratorios para que se les entreguen constancias de solicitud de reconocimiento de la condición de refugiados por parte de la COMAR o bien, se les expidan visas por razones humanitarias por parte del INM”, declaró la CNDH.
Las quejas por las que ahora se pronuncia la CNDH tienen su inicio en la insatisfacción constante de los migrantes ante la demora de sus trámites en la ciudad de la frontera sur mexicana y las malas condiciones en los campamentos de migrantes.
Días atrás, un grupo de cubanos exigió ante la comisión una solución que les permita transitar por México de forma legal, en una caravana, y que los agentes migratorios no los detengan, no los criminalicen ni los deporten.
“Somos alrededor de 3,721 migrantes, pero hay muchos más que no se han agregado a la lista, solo niños hay 624, hay 2,122 hombres, 1,307 mujeres, entre ellas muchas embarazadas que han perdido sus hijos debido a la mala situación de calle, porque nadie tiene para pagar alquileres u hoteles", declararon ante el organismo.
El gobierno de México informó que ha recibido una cifra récord de más de 58,000 solicitudes de refugio en la primera mitad de 2022.
Ante un flujo migratorio sin precedentes en esa región mexicana, la CNDH atiende el reclamo de los migrantes que solicitan transitar hacia la frontera con Estados Unidos.
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