Vídeos relacionados:
La única fábrica existente en el centro de Cuba para producir almohadillas sanitarias (íntimas) trabaja solo unos 10 y 15 días al mes y en el primer trimestre del año no encendió su maquinaria ni una sola jornada.
Con este nivel de producción la empresa ubicada en Sancti Spíritus ha podido producir apenas dos millones de paquetes de almohadillas, lo que es insuficiente si se tiene en cuenta que abastecen a seis provincias del territorio cubano (desde Matanzas a Camagüey), y solo han podido completar dos ciclos de venta, de acuerdo con el periódico oficialista Escambray.
Lo más leído hoy:
Ángel Pozo González, director de la Unidad Empresarial de Base Mathisa Sancti Spíritus, justificó los bajos niveles de producción con el embargo de Estados Unidos y que deben comprar la materia prima en destinos como España, Finlandia, China y México, aunque este último país es el más cercano de los que mencionó.
El directivo dijo que dependen de la capacidad de compra que tenga el país para abastecerse de cintas, superabsorbentes y otros insumos, que al adquiriste "desde naciones muy distantes", hacen que se encarezca el costo.
Sin embargo, Pozo González no especificó los precios que deben pagar por esas materias primas ni dio detalles de cómo el embargo estadounidense impide la adquisición de ellas, ya que al parecer pueden adquirirlas en al menos cuatro países, uno de ellos perteneciente a la región centroamericana.
Aseguró que tienen capacidad para producir durante diez días, y una vez que pasen ese tiempo, deberán esperar a que lleguen más provisiones.
En marzo de este año fue noticia el desabastecimiento de almohadillas sanitarias en La Habana y la activista Juliette Isabel Fernández Estrada explotó en las redes sociales ante la escasez de un producto que es imprescindible para las mujeres.
"El Estado no ha vendido ni uno de los exiguos paquetes de íntimas que tenemos derecho a comprar en las farmacias, a razón de diez íntimas al mes por mujer entre 10 y 55 años de edad", escribió.
Archivado en: