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Los reportes de focos de Aedes aegypti y de casos con sospecha de infección por dengue aumentaron en la provincia de Pinar del Río a partir de la temporada de lluvias.
La situación más complicada la presentan los municipios de Pinar del Río, Consolación del Sur, San Luis, San Juan y Martínez y Los Palacios.
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La cabecera provincial, Pinar del Río, enfrenta el problema más crítico, al registrar en sus cuatro áreas de salud la mayor cantidad de casos sospechosos de todo el territorio.
Las llamadas brigadas "autofocales", encargadas de identificar y eliminar los núcleos de mosquitos, han sido muy irregulares y no han ayudado al control del Aedes en la provincia más occidental de Cuba.
Ante la urgencia que supone el aumento de los focos, la Dirección provincial de Vigilancia y Lucha Antivectorial de Pinar del Río anunció un plan para evitar nuevas infestaciones, según informó al periódico Guerrillero Carlos Fuster Callaba, subdirector de la entidad.
Las medidas, que deberían comenzar a implementarse desde finales de este mes, incluyen verter el insecticida Abate en los depósitos, una de las funciones de las brigadas autofocales.
También han fallado las acciones para atender los casos sospechosos y confirmados, a causa de la falta de combustible para trasladar a los pacientes.
Ante el riesgo de aumento de infestación, se prevé sanear las manzanas donde se reporten casos sospechosos y realizar un tratamiento focal y autofocal en las zonas de riesgo, poniendo especial énfasis en las escuelas que cesarán sus actividades por vacaciones.
En 2021 Cuba detectó el mayor número de focos de mosquitos transmisores del dengue de los últimos 15 años, con mayor incidencia en las provincias de Camagüey, Villa Clara, La Habana, Holguín y Santiago de Cuba.
Los índices de infestación por Aedes aegypti no han disminuido desde 2007.
Los tanques para almacenar agua continúan siendo los principales sitios para la aparición de mosquitos y las autoridades sanitarias siguen instando a la población a realizar el control autofocal para evitar el surgimiento del dengue.
Los casos de dengue reportados en 2021 habían disminuido un 29.3 por ciento respecto al año anterior, pero este 2022 la reactividad ha aumentado.
En febrero pasado, las autoridades de Ciego de Ávila alertaron que los casos de dengue se dispararon en un 41.9 por ciento.
El resto del país no escapa a esta situación. En días pasados, un padre denunciaba una plaga de mosquitos en el círculo infantil de su hijo, en La Habana, motivo por el cual el pequeño se hallaba cubierto de picaduras.
“Ya hemos ido al policlínico a pedir una fumigación: No hay para fumigar, según nos explicaron [por] el recrudecimiento del bloqueo, etcétera. Y mientras los mosquitos siguen dándose gusto con los pequeños”, condenó.
El escenario crítico con los focos de mosquitos parece replicarse en toda Cuba.
Las lluvias, el trabajo irregular de las brigadas autofocales y las malas condiciones sanitarias garantizarán la proliferación de enfermedades asociadas con el Aedes aegypti.
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