El gobierno cubano negó la entrada de la prensa extranjera y de miembros del cuerpo diplomático al juicio contra Luis Manuel Otero y Maykel Osorbo, que este martes celebra su segunda sesión.
El Tribunal de Marianao de La Habana amaneció el lunes rodeado de policías y agentes de la Seguridad del Estado, y a más de una cuadra un cordón policial solo permitía el acceso a la zona a vehículos autorizados.
Apenas algunos familiares pudieron entrar a la sala.
Representantes de las embajadas en La Habana de Países Bajos, Alemania, República Checa, Reino Unido, Noruega y Suecia, esperaron en los alrededores durante casi dos horas, después de presentar una petición formal para entrar al juicio en calidad de observadores.
"Simplemente queremos entrar para observar el juicio. Queremos que se respeten los derechos humanos en todos los lugares y países", explicó un funcionario alemán a la agencia EFE.
Tampoco se autorizó el acceso a medios de comunicación internacionales ni ONG.
En las redes sociales, la Seguridad del Estado compartió mensajes de ataque a los diplomáticos.
El usuario de Facebook Guerrero Cubano cuestionó el interés de los gobiernos europeos en la situación de Alcántara y Osorbo, a quienes llamó "delincuentes comunes". Antes publicó fotos y críticas a la prensa extranjera, pero luego borró esa parte del mensaje.
"Son sus criaturas, ellos los crearon y amamantaron, por eso a algunas embajadas europeas les interesa mucho más el juicio de un par de delincuentes comunes como Alcántara y Osorbo que el sufrimiento de todo un pueblo por un bloqueo brutal y genocida. EE.UU. manda, ellos obedecen y hacen el trabajo sucio. Zúñiga Brown no puede aparecerse allí como hacía en San Isidro", comentó el perfil anónimo, un trol del régimen cubano.
Acerca de la vista oral celebrada el lunes, la curadora de arte y activista Anamely Ramos denunció un "mal desempeño" del abogado de Maykel Osorbo.
"Hoy todo el mundo ha coincidido que la defensa de Maykel es una reverenda mierda. No nos extraña. Sabemos hasta dónde puede un abogado de bufete colectivo en Cuba, maniobrar en casos políticos como este", expresó Ramos.
La joven recordó que días antes del juicio removieron a la abogada que debía encargarse de la defensa de Maykel.
"El resultado es que este nuevo abogado, Yoilandris Savón, casi ni habló y fue Maykel mismo quien explicó todo, con una serenidad -me dicen- que muchos no reconocerían en Maykel pero los que lo conocemos bien, sí", relató Anamely en su muro de Facebook.
"Este abogado ha logrado con su mal desempeño hasta ahora, que el juicio se vea desbalanceado. Que dentro del desastre en general, la injusticia y la tristeza absoluta que se abalanza sobre los dos, la parte relacionada a Maykel parezca mucho más desprovista de todo", resumió.
El proceso contra ambos líderes del Movimiento San Isidro ha sido calificado de "farsa" y un "circo" por activistas y grupos defensores de derechos humanos.
En ciudades como Madrid y Miami cubanos residentes se manifestaron en solidaridad con los dos artistas y protestaron contra el proceso judicial.
En Cuba, periodistas independientes y activistas de la sociedad civil amanecieron el lunes con sus viviendas sitiadas por la Seguridad del Estado, y las fuerzas represivas les prohibieron salir a la calle para que no fueran al tribunal.
Juan Pappier, investigador sénior de Human Rights Watch (HRW) para las Américas, aseguró en Twitter haber recibido "denuncias creíbles de cortes de internet, intimidaciones y restricciones para que activistas y periodistas no puedan presenciar el juicio o acceder a su interior".
"Los gobiernos democráticos de América Latina y Europa deben exigir su liberación", agregó.
Otero Alcántara y Osorbo enfrentan peticiones fiscales de siete y 10 años de privación de libertad, respectivamente. El primero está acusado de delitos como ultraje a los símbolos patrios, desacato agravado y desorden público, mientras que al segundo se le imputan agresión, desorden público y evasión de presos o detenidos.
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