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Doce personas aún se mantienen hospitalizadas tras la tragedia del hotel Saratoga, que ha dejado como saldo a 46 víctimas mortales como consecuencia de la explosión ocurrida el 6 de mayo último.
Según el último parte del Ministerio de Salud Pública de Cuba, hasta las 10:00 a.m. de este domingo, se reportaban 99 personas como lesionadas en el siniestro, de las cuales 12 se encuentran hospitalizadas y 41 recibieron el alta médica.
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La nota detalla que de los pacientes hospitalizados, cuatro son menores de edad, quienes reciben atención médica en el Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez. Dos de ellos están reportados como graves e igual número de cuidado.
Los ocho adultos que permanecen ingresados son atendidos en los hospitales Calixto García (3), Hermanos Ameijeiras (2), Instituto de Neurología y Neurocirugía (2) y en la Clínica Internacional Cira García (1). De estos pacientes, según el parte, uno sigue reportado en estado crítico, tres como graves y cuatro de cuidado.
Este viernes falleció José Antonio Ferrer Acanda, de 50 años y residente en La Habana, considerado la víctima fatal número 46 de la tragedia, quien se hallaba en estado crítico en el Hospital Clínico Quirúrgico Docente "Calixto García" de La Habana, adonde fue trasladado tras la explosión.
La víspera trascendió que la madre de una de las 46 víctimas de la explosión en el Hotel Saratoga está exigiendo respuestas al gobierno sobre la muerte de su hijo.
Vilma Vázquez Monzón es la mamá de Yassel Díaz Vázquez, trabajador del hotel, cuyo cuerpo fue identificado el lunes pasado junto a los de otras cinco personas.
"Cómo podré calmar este dolor y esta impotencia que tengo, mi hijo de 37 años de edad lleno de salud, lleno de sueños que se quedaron sin cumplir, lleno de vida, padre de dos niños, buen esposo, buen hijo (el mejor de todos), buen hermano, buen compañero y sobre todo varón de Dios", expresó en su muro de Facebook.
"Estoy reclamando ante Cuba respuestas a esta terrible situación, ya sea por negligencia o sea provocado por seres sin piedad y sin escrúpulos. Si su muerte hubiese sido por causas naturales (la COVID, una enfermedad, incluso algún tipo de accidente)a pesar de no entenderlo, estaría más tranquila", afirmó.
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