El gobierno de Cuba informó este martes que ascendió a 42 el total de fallecidos tras la explosión en el Hotel Saratoga, de La Habana, tras las identificación de otras dos víctimas fatales.
Las personas fallecidas son María Consuelo Álvarez Valdés, de 77 años, y Juan Carlos Díaz Álvarez, de 55, de acuerdo con la más reciente información publicada por el Ministerio de Salud Pública.
Hasta las 11:30 a.m. (hora local) de este martes, se reportaban 96 personas lesionadas, de las cuales 17 se encuentran hospitalizadas, mientras que 37 pacientes recibieron el alta médica.
De los hospitalizados, cuatro están reportados en estado crítico, uno grave y siete de cuidado; y hay un turista español, que se identificó anteriormente como César Román Santalla, de 30 años.
Asimismo, se informó que permanecen ingresados 5 menores de edad, dos en estado crítico y uno grave.
La mayoría de los pacientes se encuentran en el hospital Calixto García, el resto fueron enviados a otras cuatro instituciones de salud pública de la capital.
"Reiteramos el agradecimiento a todos los organismos, organizaciones y pueblo en general, que ha apoyado las acciones que realizamos con los pacientes y sus familiares, así como, la preocupación mostrada por los pacientes hospitalizados", dijo el MINSAP en su comunicado.
En la madrugada de este martes se encontró el cadáver de otra de las víctimas que se reportaba desaparecida, y de acuerdo con las declaraciones del mandatario cubano Miguel Díaz-Canel, estas personas deben ser la prioridad de los rescatistas.
María Consuelo Álvarez Valdés era abuela de una joven cubana que tras la explosión pidió ayuda a los voluntarios y rescatistas de la Cruz Roja para localizarla.
La anciana residía en el edificio de Prado número 609, entre Monte y Dragones, uno de los que sufrió severos daños estructurales tras el siniestro del viernes pasado, que afectó las viviendas de casi un centenar de cubanos.
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