Cientos de cubanos hicieron una enorme cola este fin de semana frente a la tienda Flores, en el municipio Playa, en La Habana, para comprar alimentos y artículos de higiene.
Una persona que se encuentra en la cola y no quiso ser identificada por temor a represalias, contó a CiberCuba que desde el sábado intenta obtener un turno para adquirir algo de lo que vendan.
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"Creo que hay pollo, picadillo y aseo, pero solo lo sabes cuando llegas al mostrador", dijo el cubano que por segundo día consecutivo intentará comprar los productos que venden en moneda nacional y normados por la libreta de abastecimiento.
La fuente relató que para poder comprar no es suficiente con madrugar, en su caso tuvo que pagarle a un colero para que le reservara un turno entre los primeros.
"El sábado llegué a las cuatro de la mañana y no clasifiqué. Espero que hoy alcance algo. Esto es insoportable", apuntó.
Le preguntamos al cubano si había control policial y aseguró que los oficiales llegan después de las nueve de la mañana, cuando ya todo está organizado, así que su presencia tampoco es del todo necesaria.
"Solo vienen para dar la sensación de que hacen algo, pero en realidad no hacen nada", aseveró.
En Twitter se compartió un video de esa misma cola, donde se puede ver la concentración de personas frente a la unidad comercial con la esperanza de adquirir algún producto de primera necesidad.
La escasez de alimentos y otros artículos básicos en Cuba, además de la imposibilidad de la mayoría de la población para adquirir productos en las tiendas que venden en dólares estadounidenses, obliga a los cubanos a dedicar muchas horas del día a hacer colas.
Esta semana trascendió que en las inmediaciones del mercado de Cuatro Caminos, en La Habana, se aglomeró un número de personas impresionante con el fin de adquirir alimentos.
Se desconoce el total de personas que ese día se dieron cita, pero según las imágenes divulgadas en redes sociales, el total era abrumador, incluso algunos llegaron a comparar la multitudinaria concentración con los desfiles del Primero de Mayo.
A pesar de las denuncias en diferentes plataformas y el evidente desabastecimiento, el gobierno culpa al embargo estadounidense y la crisis económica internacional de la crítica situación que sufren los ciudadanos.
Por su parte, expertos en asuntos económicos responsabilizan al Partido Comunista por su política totalitaria y el acaparamiento de todo el poder, en detrimento de los más desfavorecidos.
Las tiendas en MLC (eufemismo para evitar el empleo del término dólar) se suponía que serían temporales y abastecerían de divisas la red de mercados minoristas en moneda nacional, sin embargo, estas continúan sin garantizar lo mínimo indispensable para los ciudadanos.
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