Cinco motos eléctricas provocaron un incendio en el parqueo de la sede del gobierno de Camagüey este martes, según deja ver un video que circula en redes sociales.
La batería de una de las motos explotó y provocó una serie de explosiones en cadena que generaron un incendio.
Lo más leído hoy:
En el video se ve lo que queda de las cinco motos, en llamas, y aún algunas explosiones más leves. Uno de los trabajadores del lugar sofocó el incendio con un extintor.
El aumento de los incendios de motos eléctricas en Cuba –también conocidas como motorinas– es notable en los últimos años. En febrero, la explosión de una batería de litio de una moto eléctrica provocó un incendio que causó grandes estragos en la Casa de Cultura Leonel Rugama del municipio Sandino, en Pinar del Río.
Pocos días antes, se reportó el incendio de una moto eléctrica en las afueras del Hospital Clínico Quirúrgico Docente Salvador Allende, conocido como La Covadonga, del municipio Cerro, en La Habana.
Las últimas cifras oficiales del Departamento Nacional de Extinción del Cuerpo de Bomberos de Cuba arrojaban 263 explosiones de motos eléctricas en los primeros seis meses de 2020, que coincidieron con la cuarentena obligatoria por coronavirus y, por tanto, con la restricción de movimiento, por lo que las cifras luego de que se levantaran las prohibiciones han ido en aumento.
De acuerdo con el Cuerpo de Bomberos y el Departamento de Averías, Explosiones e Incendios del Ministerio del Interior, estos incendios se suscitan por un fenómeno conocido como embalamiento térmico, que se produce por el exceso de presiones acumuladas en el interior de la batería, debido a la reacción química que libera calor y al mismo tiempo se retroalimenta de él.
"Se fractura su envoltorio y expande a gran velocidad una nube de vapores inflamables a elevadas temperaturas que, al contacto con el oxígeno del aire, puede causar una explosión acompañada de llamas", explicó a medios oficialistas Jercy González Longo, especialista del Departamento Nacional de Extinción del Cuerpo de Bomberos de Cuba.
González resaltó que la reacción puede sobrepasar los 700°C y desatar explosiones en cadena al afectarse el resto de las celdas de la batería. Además, el plástico de la carrocería y los accesorios contribuye a dispersar sustancias tóxicas al combustionar.
La Habana acumula el 47.2% del total de incidentes, seguida por Artemisa, con un 10.2%; Matanzas, con un 9.5%; y Villa Clara, con un 7.6%.
Archivado en: