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Tras tocar tierra en Key West, 13 migrantes cubanos fueron detenidos por una Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, que en unión con agentes locales, respondieron a un aviso de posible contrabando en ese cayo del sur de Florida.
La organización estadounidense publicó la noticia en su cuenta oficial de Twitter donde además afirmó que los caribeños fueron puestos en custodia federal tras tocar tierra en Cayo Hueso a bordo de una embarcación casera.
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En el post puede apreciarse también una foto del barco, bastante deteriorado, aunque la información no ofrece detalles de la condición de sus tripulantes ni del estado de salud con que llegaron a territorio de Estados Unidos.
Este fin de semana trascendió el rescate de otros cuatro balseros por parte de la tripulación del crucero Royal Caribbean Celebrity APEX, quienes encontraron a los migrantes casi a punto de ahogarse, a bordo de una precaria embarcación a 50 millas de la isla.
Además de viajar en la destruida nave, los cubanos no tenían suministros de ningún tipo, por lo que su vida corría verdadero peligro en el cruce desde Cuba hasta Florida, por una zona marítima de alta peligrosidad, debido a las fuertes corrientes del Golfo de México que dificultan la travesía.
Hasta el pasado 23 de febrero, la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG, por sus siglas en inglés) había informado la captura de 842 balseros cubanos, en los últimos cuatro meses, cifra además, superior a todas las interceptaciones del último año fiscal (octubre de 2020 - septiembre de 2021).
De mantenerse la tendencia, el número de quienes se lanzan al mar en su intento de llegar a Estados Unidos podría rondar los 2,500, cifra que incluso pudiera crecer más si mejoran las condiciones climáticas en el Estrecho de Florida. Sería esta la mayor cantidad de migrantes ilegales que utilizan esta vía, en los últimos cinco años.
Solo en el año fiscal de 2016 se registraron datos más alarmantes, con un éxodo de 5,396 balseros, impulsados por el anuncio del entonces presidente de EE.UU., Barack Obama de poner fin a la política de “Pies secos, pies mojados”.
La crisis migratoria en Cuba es tal, que un día después de este anuncio de la Guardia Costera estadounidense, otras 42 personas fueron repatriadas a la nación caribeña tras ser detenidas a bordo de dos embarcaciones precarias.
El traspaso fue realizado por la tripulación del Margaret Norvell, que patrulla el Estrecho de Florida, informó la USCG. Trascendió además que los indocumentados fueron interceptados frente a las costas de Sugarloaf Key y Long Key.
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