Activista Claudia Genlui portará bandera cubana en protesta por prisión de Luis Manuel Otero

La también curadora de arte recreará así el performance “Le drapeau”, del artista visual cubano, el cual le valió un arresto de 13 días en la prisión de Valle Grande en La Habana y el cargo de ultraje a los símbolos patrios, que las autoridades alegan para mantenerlo en su actual confinamiento.

Claudia Genlui y Luis Manuel Otero Alcántara © Facebook/ Claudia Genlui - Luis Manuel Otero Alcántara
Claudia Genlui y Luis Manuel Otero Alcántara Foto © Facebook/ Claudia Genlui - Luis Manuel Otero Alcántara

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Este artículo es de hace 2 años

La activista cubana Claudia Genlui Hidalgo portará sobre sus hombros una bandera cubana en señal de protesta por el encarcelamiento del artista visual Luis Manuel Otero Alcántara, quien desde hace nueve días inició una huelga de hambre y sed.

La también curadora de arte recrea así el performance “Le drapeau”, de Otero Alcántara, el cual le valió un arresto por 13 días en la prisión de Valle Grande en La Habana y la acusación de ultraje a los símbolos patrios, que las autoridades alegan para mantener encerrado al líder del Movimiento San Isidro (MSI), desde hace seis meses.


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“El performance cuestiona el valor del símbolo, en este caso un símbolo nacional y su imaginario en una sociedad como la cubana, donde los conceptos de nación, nacionalidad e identidad tienden a ser manipulados por el gobierno”, explicó en redes sociales Genlui Hidalgo, quien además recordó la poca tolerancia de las autoridades del régimen con respecto a la mencionada pieza.

“No es la primera vez que me siento parte de las acciones artísticas de Luis. Recuerdo llevar sobre mi cabeza el casco de la obra 'Los niños nacieron para ser felices no para morir en derrumbes', las veces que él era detenido por realizar este gesto. Una evidencia más de cómo en Cuba se censura el arte y la carencia de libertad que tienen los artistas”, afirmó.

La activista cubana dijo que se suma así a una iniciativa del MSI, de retomar algunas de las obras de Otero Alcántara, para resaltar que su trayectoria artística es indiscutible por lo que constituye una forma de revisitar sus cuestionamientos como creador, repensar el cambio que necesita el país y protestar contra las injusticias que sufre el pueblo cubano.

Genlui Hidalgo recordó en su post el slogan “la bandera como mi segunda piel” y agregó que “será esa bandera el símbolo del dolor que hoy representa Cuba para mí, una Cuba en la que sus hijos son sacrificados por la libertad, una Cuba donde la injusticia se ha convertido en la bandera de su gobierno, una Cuba donde está muriendo un artista”.

Desde el 18 de enero último se conoció la decisión de Otero Alcántara de negarse a beber agua, a ingerir alimentos y a recibir visitas y llamadas en la prisión de máxima seguridad de Guanajay. La propia Genlui Hidalgo compartió la noticia en sus redes sociales y exigió la libertad del artista cubano.

"Luis Manuel Otero Alcántara acaba de llamar desde la prisión de máxima seguridad de Guanajay, donde se encuentra hace más de seis meses. Posiblemente sea la última llamada que haga por el momento. Llamó para comunicar de manera breve pero firme, que está al límite. Que desde hoy rechaza todos los 'derechos' que tiene un preso, porque él no debería serlo. Su cuerpo está preso por una injusticia, pero su mente siempre ha sido libre y así quiere mantenerla", informó.

Hasta la fecha han sido numerosas las muestras de respaldo a Otero Alcántara. Este 25 de enero, un grupo de artistas convocó a una vigilia en la Torre de la Libertad de Miami, en favor también del resto de los presos políticos encerrados por la dictadura.

A propuesta de la curadora de arte Anamely Ramos los participantes en la iniciativa debieron vestir de blanco y portar carteles con los rostros de los presos. "Con velas, con flores; con todo lo que sientan pueda llevar un rayo de luz, fuerza y aliento", subrayó.

Por su parte, el escritor Carlos Manuel Álvarez dedicó a Otero Alcántara el primer soneto de su autoría. "Profundamente avergonzado, profundamente confundido y rabioso, les dejo el primer soneto que escribo en mi vida”, comentó Álvarez para introducir sus versos a los que tituló “Huelga de hambre y sed”.

“No mastica la boca del recluso/ ni el agua le alivia la garganta./ Con ceniza y carbón riega la planta/ que ha sembrado la mano del abuso. / El césped de su cuerpo pisoteado/ esconde recompensas sugeridas./ De la constelación de sus heridas/ un largo olvido fue desenterrado: el modo de hablar con el silencio/ y la vigilia de la piel dormida,/ así como un rezo íntimo sin suerte. Estamos, vieja sangre destruida,/ muriendo la vida de su muerte/ y él viviendo la muerte de la vida, expresó el también periodista en ese primer acercamiento a la poesía.

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