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Marisol Cruz Zaldívar, madre de la prisionera política cubana Yeilis Torres Cruz, exigió al régimen la liberación de su hija, detenida hace ocho meses luego de encarar públicamente y ser agredida por el vocero oficialista Humberto López.
En una publicación en el perfil de Facebook de la joven, Cruz Saldívar afirmó que desea ver a la exfiscal "junto a sus hijos, feliz y sonriente".
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Asimismo, posteó imágenes de ambas y dijo que el encierro de la activista es una situación que se le hace insoportable.
"Libertad para mi hija, Ya", clamó en la red social, donde hace unos días también se solidarizó con "todos los que están detrás de una reja por solo pensar diferente".
En esa ocasión mencionó que el hijo de seis años de Torres Cruz "todos los días pregunta ¿cuándo viene mi mamá? Y yo, su abuela, no sé qué responder. ¿Dónde están los derechos de un niño? que por solo su madre hacer una directa y hacer una pregunta, se le prive de su libertad", agregó.
También explicó que la hija adolescente de la detenida, quien cumplió 15 años en septiembre del pasado año mientras su mamá estaba presa, sufre diariamente a causa del injusto encierro.
"Espero que pronto se pueda salir de esta pesadilla. Ya es hora de que mi hija esté libre", aseguró.
El 11 de mayo de 2021 la activista y miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), fue detenida y trasladada al centro penitenciario de 100 y Aldabó, acusada de "atentado" contra el presentador y vocero oficialista de la televisión cubana Humberto López, informaron entonces sus familiares.
Días antes había transmitido una directa para Facebook donde abordó a López cuando salía de la casa de su amante, según ella le dijo en ese video que de inmediato se volvió viral, dados los sentimientos encontrados que provoca en la población del país este polémico defensor del régimen cubano.
En el video se logra escuchar cuando el también miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), se abalanza sobre la mujer para arrebatarle el teléfono y después inicia una persecución donde la tira al suelo y la fotografía con ayuda de su chofer, denunció ella.
Al personarse en la unidad policial correspondiente para abrir una demanda contra López, la joven terminó con una orden de arresto domiciliario y una acusación en su contra por el delito de atentado. Después fue finalmente detenida y trasladada a la prisión, donde aún no se le ha celebrado juicio.
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