Los abuelos del activista camagüeyano Dixán Gaínza Moré pidieron la libertad de su nieto, detenido por manifestarse el 11 de julio, pues además de la injusticia cometida contra él, “es el único que se ocupa de nosotros”, añadieron.
En tres videos de Tik Tok, se muestran las precarias condiciones en que viven los ancianos, abandonados por el gobierno, en una casa de madera que apenas se sostiene, casi sin muebles, ni equipos electrodomésticos.
Lo más leído hoy:
Los abuelos de Gaínza Moré expresaron la falta que les hace su nieto, quien los ayudaba económicamente y con las tareas domésticas que ellos, por su edad, ya no pueden realizar. Asimismo, el señor narró que hace poco tiempo estuvo enfermo y en el hospital no lo atendieron bien ni le garantizaron los medicamentos.
Visiblemente emocionados, los dos adultos mayores pidieron la excarcelación del joven y de todos los presos políticos que se oponen al régimen cubano.
“Estamos viejitos y él es el único que se ocupa de nosotros, por eso necesitamos su libertad”, afirmaron.
Dixán Gaínza Moré, de 35 años, fue arrestado en su domicilio luego de las manifestaciones del 11J, como parte de un operativo en el que participaron dos agentes de la Seguridad del Estado.
Su madre, Mayra Moré refirió a La Hora de Cuba que en los videos de las protestas se demuestra que fue un hecho pacífico y su hijo no hizo más que caminar por las calles de Camagüey reclamando un mejor país y un gobierno que de verdad represente los intereses del pueblo.
En los primeros días de su detención “lo pude ver una o dos veces, unos pocos minutos y siempre rodeado de guardias” afirmó Mayra, quien comentó además que su hijo es una persona muy decente, no un vándalo como quiere hacer creer la Seguridad del Estado.
Según informa la Organización No Gubernamental (ONG) Cubalex, luego de su detención, pasó 16 días en huelga de hambre, en la tercera unidad policial de la Carretera Central de Camagüey. La Fiscalía lo acusa de desorden público e instigación a delinquir. A pesar de no poseer antecedentes penales, le niegan la libertad y lo transfirieron a la prisión de máxima severidad conocida como "Kilo 8".
Aún sin fecha de juicio, la abogada que contrató su familia ha pedido en dos ocasiones un cambio de medida, que ha sido denegado. La sentencia que pide la Fiscalía es de cuatro años de privación de libertad por desórdenes y siete por un delito de atentado, para una sanción conjunta de 10 años.
El listado de Cubalex documenta 1,291 detenciones en total desde el 11 de julio. En espera de procesos penales todavía están 600 cubanos.
Archivado en:
