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El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel no consigue escapar de las burlas y la una nueva andanada la recibió este sábado luego de cambiar su imagen de portada en Twitter.
Díaz-Canel encabezó su perfil en la red social con una foto donde se lee la frase “Fidel, habla, ¡te necesito!”. Al rato, el activista Mag Jorge Castro compartió la “iniciativa” del gobernante, calificándola en el acto de “ridícula”.
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“Cuando pensabas que no había lugar para más ridículo te topas a Díaz-Canel queriendo hablar con un muerto que lleva más de cinco años dentro de una piedra... y pensar que esta gente gobierna la nación”, dijo el activista.
“Bueno! No lo subestimen, a lo mejor la piedra tiene una contestadora automática, lo que perdió la conexión a internet”, comentó en broma un usuario refiriéndose al monolito donde yacen las cenizas del fallecido dictador, en el cementerio Santa Ifigenia de Santiago de Cuba.
“Parece una religión, una invocación a un fallecido, una extrema adoración, qué oscuro todo, de verdad”, expresó un segundo internauta al tiempo que otros recordaban las palabras del gobernante venezolano Nicolás Maduro en que aseguraba que el difunto exmandatario Hugo Chávez se había manifestado ante él en la forma de un pajarito.
La imagen usada por Díaz-Canel para “adornar” su Twitter, proviene en realidad de una obra del grupo teatral La Colmenita estrenada el viernes como homenaje a Fidel Castro, la cual presenció el hermano del dictador y exgobernante Raúl Castro, conmovido hasta las lágrimas.
En ella, el conjunto infantil cuenta la travesía de un grupo de niños que llegan a la Sierra Maestra como parte de "una Guerrilla por la Historia", para revivir pasajes de la vida en ese territorio del dictador cubano.
La obra sirvió también para inaugurar el Centro Fidel Castro Ruz, en una lujosa casa de la calle 11 y Paseo, en La Habana, convertida en una institución para perpetuar el legado del llamado líder histórico de la revolución.
El jueves 25 de noviembre se cumplieron cinco años de la muerte de Castro, que en el país fue evocada de distintas maneras. Algunas de ellas no salieron según lo previsto y acabaron en ridículo, como la del Proyecto Nuestra América, que echó al mar en La Habana una réplica de cartón del yate Granma y acabó volteándose desastrosamente entre las olas.
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