El activista Magdiel Jorge Castro denunció este lunes el acoso bajo el que viven los coordinadores de Archipiélago, a propósito del 15N, y destacó la valentía de los cubanos que se expresaron de diferentes formas en esta jornada por el cambio.
Entre los moderadores de la plataforma cívica que se encuentran con vigilancia evidente, Jorge Castro mencionó a Yahima Díaz, de Consolación; Yunior García, en La Habana; Iris Mariño, de Camagüey; Saily González, de Villa Clara, así como Javier Mora y Zulema Gutiérrez, en Holguín.
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En similar situación se encuentra Miguel Montero, tras ser detenido y posteriormente liberado este domingo, después de cinco horas en un centro penitenciario de Holguín, según confirmó el propio activista a CiberCuba. El coordinador de la plataforma cívica había transmitido en vivo desde la estación popularmente conocida como "Todo el mundo canta".
Jorge Castro denunció la desaparición por más de 48 horas de la promotora del 15N y madre de dos niños Daniela Rojo, de la cual dijo no tener información. “Estamos haciendo todas las presiones posibles, tanto públicas como de forma directa, para conocer qué está pasando con Daniela”, preciso el activista.
En cuanto al acoso sobre Yunior García, el defensor de los derechos humanos hizo alusión al acto de repudio realizado en los bajos de la vivienda del dramaturgo y aclaró que desde este domingo no le ha sido posible establecer contacto con el líder de Archipiélago. Por esa razón, explicó, “algunos amigos intentarán llegar a su casa el día de hoy para traernos noticias”.
“Yo creo que es lamentable que estas cosas sucedan, pero lo peor es que se normalicen. Es increíble cómo estuvo allí Humberto López transmitiendo en directo aquellas cosas horrendas que le hicieron frente a casa de Yunior García”, dijo y señaló la degradación de los métodos represivos del poder en Cuba.
“El régimen cubano está creando un símbolo de resistencia ante su represión”, aseguró el activista y consideró que “las imágenes de la bandera nacional tapando a un ciudadano indefenso desde una ventana armado con una rosa blanca” e impedido de salir, “van a quedar como el símbolo de la resistencia de la sociedad civil cubana contra la represión que ha desatado el régimen”.
Para Jorge Castro, “la gente se adueñado de la jornada cívica con una valentía admirable” y consideró “alentador la cantidad de jóvenes que se han hecho eco de vestirse de blanco, que se han hecho eco de postear con una rosa blanca, de caminar individuales por las calles con una rosa blanca, de aplaudir”, a pesar de la represión y la militarización del país.
“Yo creo que si algo podemos sacar de esta jornada es que la gente necesita un cambio, la gente ya no puede quedarse callada porque alguien le diga que debe quedarse callado”, sentenció.
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