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Las Casas de Cambio de divisas extranjeras en Cuba, conocidas popularmente como CADECA, comenzó a vender tarjetas prepago de combustible para su uso en los CUPET.
Una nota publicada por el Banco Central de Cuba (BCC) informa que las oficinas de CADECA de todo el país asumieron ya la comercialización de estas tarjetas magnéticas.
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Como requisito, el cliente deberá llevar la identificación personal y el efectivo en moneda nacional por el monto de la tarjeta que desee. Estas se emiten por un valor mínimo de 25 CUP y un máximo de 1,250 CUP.
La venta de se efectúa en los horarios de atención al público de las oficinas de CADECA, de lunes a sábado de 8:30 a.m. a 4:00 p.m., con horario extendido hasta las 8:00 p.m., y los domingos hasta las 11:30 a.m.
La nueva medida ha generado críticas de usuarios que aseguran la compra de combustible por este método en lugar de con dinero en efectivo no tiene ventaja ninguna, y lo único que trae es más demora y malestar entre los compradores, además de que se pierde más dinero y tiempo en el proceso de imprimirlas.
"Desean eficiencia y multiplican los trámites de algo que era tan sencillo como echar gasolina en un servicentro. Ahora intervienen dos organismos diferentes y no sé cuántos trabajadores más. Los que dirigen la economía de este país son unos verdaderos genios de la eficiencia. (...) ¡Hasta el carnet de identidad hay que presentar! Vamos, que lo único que se fortalece en este país es la burocracia. Más trámites y más colas", señaló un escritor en el muro de Facebook del BCC.
"Mi opinión sobre éstas tarjeta es totalmente negativa. Más aglomeración de personas y más trabajo tanto para el cliente como para los trabajadores", expresó un trabajador de una secundaria básica en Pinar del Río.
"Muy mala decisión del gobierno implantar este sistema para la compra de combustible, lo que antes era sencillo ahora se convierte en una odisea, más trabajo para el cliente que debe obtener dicha tarjeta en una entidad y después ir a la otra para utilizarla, sin contar que debes pasar por 3 o 4 bombas para completar el servicio...", denunció un expendedor de boletines en la empresa Viajero, en Nueva Gerona.
"Este proceso está causando mucho disgusto en la población que a diario tenemos que chocar con esa nueva modalidad", aseguró un cuentapropista.
"Por favor. no más venta de tarjetas. ¿Acaso estamos virando para atrás? ¿Cuál es el objetivo? Alguien que me convenza y me explique", pidió un trabajador de Cayo Santa María.
En diciembre del año pasado la corporación CIMEX implementó la comercialización de tarjetas prepago desechables para la compra de combustible por parte del sector privado.
CIMEX aseguró entonces que ese era un medio de pago "fácil, práctico y rápido" para las personas naturales, y publicó un listado con los 510 establecimientos que asumieron la venta de las nuevas tarjetas en todo el país, una red que se iría ampliando.
"Se pueden utilizar una vez por el cliente consumiendo el saldo total de la tarjeta. De presentarse alguna dificultad tecnológica durante el despacho del combustible, el cliente tiene la posibilidad de utilizar la tarjeta nuevamente, en un término de hasta 24 horas", precisó la empresa.
La entidad quería eliminar el pago en efectivo en su red de gasolineras desde agosto de 2020, pero debido a la crisis que causó la llegada de la pandemia de coronavirus, tuvo que posponerlo hasta diciembre.
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