La artista visual y activista por los derechos humanos Tania Bruguera publicó en su cuenta de Facebook un correo dirigido a Nelson Ramírez de Arellano, máximo representante del Centro de Arte Contemporáneo Wilfredo Lam y de la Bienal de La Habana.
El email expone las razones que asisten a un grupo de creadores para no apoyar el desarrollo del evento, uno de los más importantes dentro del panorama de las artes visuales en Cuba. Dentro de sus motivos, Bruguera destaca su compromiso con los “cubanos presos injustamente por ejercer su derecho constitucional de manifestación pacífica, incluyendo algunos artistas”.
El texto también aborda lo imprudente de mantener el acontecimiento, masivo por la cantidad de participantes y de público, en medio de una crisis sanitaria que, contradictoriamente, ha servido como una de las excusas para negar el permiso a la marcha del 15 de noviembre.
“Hemos visto una respuesta desde la institución que comienza a tomar el camino que tiende a tomarse con respecto a quienes piensan diferente es por eso, para evitar la acostumbrada violencia, y dado que usted ha hablado en sus entrevistas que tiene como intención para esta bienal crear un espacio donde se pueda ejercer la libertad de expresión que lo invito a tener una conversación pública sobre nuestras diferentes posiciones”, añadió en su publicación la fundadora del Instituto de Artivismo Hannah Arendt.
Tania Bruguera es una de las caras más visibles y reconocidas del activismo cubano actual. Hace apenas unos días fue una de las oradoras centrales del Oslo Freedom Forum, donde resaltó la importancia de las protestas del 11 de julio e hizo referencia a la liberación del artista Hamlet Lavastida, exiliado por el régimen de la Isla.
Otros creadores y activistas cubanos también han pedido suspender la Bienal y convocaron a artistas internacionales a faltar al acontecimiento, previsto del 12 de noviembre del año en curso al 30 de abril de 2022.
Durante la edición de 2019, Bruguera también publicó una carta abierta para explicar su retirada del evento. Aludió a razones de seguridad y a la indolencia del Ministerio de Cultura de realizar la cita, cuando todavía la capital cubana sufría los estragos del tornado que afectó las zonas más pobres de la ciudad en enero. Asimismo, hizo mención al decreto-ley 349, a los presos políticos y de manera particular resaltó la detención arbitraria de Luis Manuel Otero Alcántara.
La Bienal de La Habana surgió en 1984 como un espacio alternativo para la presentación de los más prometedores artistas de Cuba y otros países del Tercer Mundo. Sin embargo, luego de 14 ediciones, el propósito de su creación se difumina ante la represión y la censura de las autoridades.
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