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Un amigo de la infancia del doctor cubano Manuel Guerra, detenido por apoyar la marcha pacífica convocada para el 15 de noviembre, denunció en sus redes sociales la injusticia que está cometiendo el régimen castrista con su compañero.
Harold de Jesús Ricardo Céspedes, quien reside en Miami, acusó a las autoridades de Cuba de privar de sus derechos a una persona solo por decir la verdad, y por defender a su país y a su patria.
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"En horas de la tarde mi amigo de toda la vida, mi hermano desde pequeños, que nunca ha usado la palabra para callar verdades u ocultarlas, fue apresado por esbirros de la tiranía, por personas que denigran mi cultura, mis tradiciones y las de mi patria, llámense tiranos, mafiosos, hampones, gente sin escrúpulos ni educación", denunció el autor del post que, según su perfil en Facebook, también es médico.
El doctor Manuel Guerra, un acérrimo crítico del gobierno, fue arrestado el sábado por la tarde cuando se dirigía a su trabajo, en el punto de control en la carretera de Holguín a Las Tunas, y de allí fue trasladado hacia la Primera Unidad de Policía del territorio holguinero.
En la publicación, su amigo Harold de Jesús tildó a los gobernantes cubanos de "ultrajadores que solo han mancillado la historia de Cuba libre", con acciones que causan dolor y oprimen los derechos establecidos para los ciudadanos dignos.
"Responsabilizo a la Policía Nacional Revolucionaria y a DSE por cualquier daño relacionado con el doctor Manuel Guerra, así sean daños físicos o psicológicos a los que están acostumbrados a infligir", advirtió.
Por último, el joven llamó a sus coterráneos a ayudar en la liberación de sus familiares, amigos y de todos los presos políticos que hay hoy en las cárceles de la Isla.
"La patria es de todos y todos la defendemos, todos los cubanos y cubanas que sientan un poco de dignidad por su país, por sus raíces, por los suyos, por la tierra que los vio nacer, por la tierra que todos queremos ver libre...", instó.
Este domingo la madre de Manuel Guerra Guerrero pudo visitarlo en la estación de la Policía de las calles Narciso López y Martí, donde la informaron que será procesado por un supuesto delito de desacato a la autoridad.
"Al implorar que retiraran la denuncia o que lo dejaran en libertad hasta que se hiciera un juicio, el oficial Wilber dijo que entendía mi posición como madre, pero que ellos tenían que realizar su trabajo y que mi hijo les había faltado el respeto", relató Ángela Guerrero Arranz en su muro de Facebook.
El militar cubano le expresó a la señora que su hijo "estaría más tranquilo" mientras permaneciera allí, por sus ideas políticas y porque manifestó su intención de asistir a la marcha pacífica del 15N en Holguín.
Maylén Susel Álvarez Ramírez, la esposa del médico, estaba presente cuando él fue arrestado en el punto de control fronterizo del Cruce de San Andrés, mientras se dirigía a atender a sus pacientes en el Hospital Nicodemus Regalado, donde estudia la especialidad de Ginecología y Obstetricia.
Ella fue testigo de cómo lo esposaron y de su discusión con los oficiales por un supuesto permiso de circulación, a pesar de que él se identificó plenamente.
"Ahora yo me pregunto ¿realmente lo dejan detenido por desacato a la autoridad o por su tendencia política?", cuestionó la joven, también doctora.
Hace apenas una semana, el galeno denunció en sus redes sociales las presiones que estaban recibiendo él y el resto de los firmantes de la convocatoria de marcha pacífica, por parte de la Seguridad del Estado.
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