Yaxis Cires, director de estrategia del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), aseguró este lunes que el Cuarto Informe sobre el estado de los derechos sociales en Cuba prueba que, además de reprimir al pueblo, el gobierno de la isla también lo ha empobrecido.
“En un momento quizás se vendió la idea a los cubanos de que no hay libertades políticas y civiles, pero, al menos, hay derechos sociales. Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que todo ha sido una farsa: ni una cosa ni la otra”, dijo Cires durante la emisión de este lunes de Las mañanas de CiberCuba.
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Una encuesta en la que participó más de un millar de cubanos a lo largo del país arrojó luz sobre los principales problemas que enfrenta la población. “En primer lugar, el 60 por ciento [de los encuestados] marcó el tema de la alimentación”, precisó el también coordinador de Cuba Humanista.
Otro de los temas que preocupa a los cubanos es el acceso a la Salud Pública y las medicinas. Al respecto, el ejecutivo señaló que "ocho de cada 10 cubanos no encuentran los medicamentos en la farmacia” y que un 20 por ciento de los entrevistados “ha tenido que consumir medicamentos vencidos”, ante la crisis sanitaria y la baja disponibilidad de los fármacos.
En los últimos meses el costo de los medicamentos en Cuba se ha disparado hasta llegar a cifras impagables por el cubano de a pie. Las autoridades han reconocido la crisis en la industria farmacéutica y la imposibilidad de suplir la demanda nacional.
Los cubanos emigrados han donado más de dos toneladas de medicinas e insumos médicos en cuestión de cuatro meses, a pesar de los altos costos de envío por no existir una vía expedita. Sin embargo, la escasez persiste y ha provocado malestar entre pacientes y personal de salud que han denunciado el colapso del sistema sanitario.
A pesar que esta es una situación harto conocida por los cubanos, el informe es necesario, sostuvo Cires, para conocimiento de la opinión pública en general, en tanto, “a nivel internacional mucha gente ha comprado la propaganda del régimen de que Cuba es un paraíso de los derechos sociales”.
El informe de 40 páginas está disponible en los idiomas inglés y español, precisamente, para llegar “a esas personas que te digan que Cuba es el paraíso”, dijo Cires, en alusión al éxito de la propaganda política que vende una imagen de la isla que no existe y que muchos aún creen, en especial, en lo que se refiere a la salud pública y la justicia social.
Otra de las preguntas en la encuesta que recogió los datos para este cuarto informe de los derechos sociales en Cuba tiene que ver con la gratuidad de la atención sanitaria, cuestión poco tratada de la que, indicó, “tendríamos que preguntarnos por qué se habla poco de esa realidad”.
“Hemos preguntado, por ejemplo, si usted o su familia ha pagado para que le atiendan en el médico y conseguir adelantar un turno… y casi el 50 por ciento dice que ha tenido que pagar por ser atendido o para que la adelanten cita”, precisó.
Para el directivo del OCDH, la práctica de pagar con favores o con dinero un servicio en teoría libre de costo para el enfermo, “provoca muchas reflexiones” e indica que “el deterioro es tan grande que uno tiene que regalar, que pagar algo para ser atendido. Es una realidad injusta”, lamentó.
Por último, insistió en la necesidad de “cambios políticos, económicos y sociales que la realidad del país pide” y advirtió que, aunque el gobierno se resista, “nosotros tenemos que pedirlos todos los días”.
En los últimos meses la situación de Cuba se ha deteriorado, tras la implementación del ordenamiento económico en enero, que ha alterado los precios y encarecido el costo de la vida. Al mismo tiempo, la represión ha ido en aumento, especialmente tras las protestas del 11J. Por ello, puntualizó Cires, la conclusión del informe es que “el régimen no solamente reprime, sino que empobrece”.
El informe del OCDH refleja el descontento de la población cubana ante la gestión ineficaz del gobierno en materia de derechos sociales como uno de los componentes de la crisis en materia de derechos humanos en Cuba.
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