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El secretario del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, el cubanoamericano Alejandro Mayorkas, afirmó que la administración de Joe Biden apoya la lucha por la libertad de los cubanos, pero los desalienta a echarse al mar para llegar ilegalmente al país.
En entrevista con el canal MSNBC, Mayorkas recalcó que quienes quieran emigrar a Estados Unidos tendrán que hacerlo por la vía legal.
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"El mensaje que nuestra administración quiere comunicar es que estamos con el pueblo cubano. Deploramos la represión de ese régimen autoritario contra el pueblo cubano. También damos un mensaje de humanidad: no se lancen al mar. En dos semanas hemos rescatado a muchas familias y hemos contado 40 personas muertas", señaló.
El funcionario recordó los peligros que enfrentan todos los que se lanzan al mar para tratar de llegar a las costas norteamericanas.
"Es un viaje inseguro, y hay una manera ordenada de hacerlo, de buscar amparo en Estados Unidos bajo la ley. Lanzarse al mar no lo es. Nosotros aceptamos las peticiones de asilo en los puertos de entrada. Es la manera humana y ordenada de proceder", subrayó.
Según Mayorkas, el tema de la migración cubana es particularmente difícil para él en lo personal.
"Mi familia perdió todo lo que tenía en Cuba. Vinimos a Estamos Unidos y mire dónde estoy ahora. Esta es la fuerza de Estados Unidos", afirmó.
El funcionario también responsabilizó al gobierno de Donald Trump de la crisis migratoria que existe actualmente en la frontera de Estados Unidos con México, subrayó la necesidad de combatir las amenazas a la Seguridad Nacional, entre las que incluyó el aumento de los cruces fronterizos ilegales.
Según sus declaraciones, la inmigración ilegal ha llegado a niveles sin precedentes y eso se debe a que la administración anterior "desmanteló nuestras capacidades para abordar" el problema migratorio.
El pasado 14 de julio, tres días después de iniciadas las multitudinarias protestas contra el régimen castrista en varias ciudades de Cuba, el secretario de Seguridad advirtió a cubanos y haitianos que no intentaran entrar al país ilegalmente por mar porque no se les permitiría entrar.
"A ningún migrante interceptado en el mar, independientemente de su nacionalidad, se le permitirá ingresar a Estados Unidos", dijo en conferencia de prensa.
En su alocución, reveló que miembros de la Guardia Costera estaban haciendo un seguimiento por aire y que no habían visto un aumento del número de migrantes desde las protestas del 11 de julio, ni tampoco después del asesinato del presidente de Haití, ocurrido el 7 de julio.
No obstante, Mayorkas subrayó que las autoridades estadounidenses estaban preparadas para enfrentar cualquier aumento de la cifra de migrantes ilegales por vía marítima.
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