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El cantaor Diego El Cigala fue absuelto del cargo de violencia de género que pesaba sobre él al “no existir indicios que sustenten la denuncia”, indicó su abogado.
Diego Ramón Jiménez Salazar, conocido como Diego “El Cigala”, comentó que las causas que movieron la acusación de violencia de género pudieran ser económicas: “El dinero, siempre es el dinero”, indicó el cantaor flamenco y añadió que “las mujeres siempre quieren dinero”, en una generalización que causó incomodidad entre los grupos de feministas.
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El Cigala fue liberado bajo la presunción de inocencia que protege a toda persona acusada sin que medien evidencias. El juez de Violencia sobre la Mujer número 7 de Madrid ha declarado que no constaban denuncias previas a este incidente.
Tras ser puesto en libertad, El Cigala declaró a Europa Press que estaba muy contento y que viajaría a Málaga para un concierto.
La libertad se acuerda al no apreciarse riesgo de fuga. La adopción de medidas cautelares, de haberlas, se están tramitando en el juzgado de Jerez, órgano competente al encontrarse en esta localidad el domicilio de la denunciante, la actual esposa del músico, y donde se tramita la causa.
No obstante, el abogado de El Cigala ha destacado a las puertas de esta sede judicial que su cliente ha sido puesto en libertad sin ninguna medida cautelar, ni personal ni patrimonial. "Entendemos que no existe indicio alguno que sustente esa denuncia", ha recalcado.
Según el jurista, el artista se encuentra "muy bien" y "con ganas de demostrar la verdad". "Está muy bien de ánimo porque se ha demostrado que no hay sustento que fundamente esta denuncia. No se ha demostrado ni su autoría ni hay reproche alguno a mi cliente", ha subrayado. El artista seguirá adelante con sus conciertos.
El cantaor flamenco fue detenido en un hotel de Madrid la noche del pasado miércoles por un presunto delito de violencia de género contra su pareja.
La denuncia contra el músico se estableció en una comisaría de la Policía Nacional en Jerez de la Frontera (Cádiz). Su pareja, Dolores (conocida como Quina), aseguró haber sufrido maltrato físico y psicológico de modo continuado a lo largo de dos años.
La policía española detuvo a Diego en el Hotel Catalonia Atocha, ubicado en el número 81 de la calle Atocha en Madrid. El músico pasó la noche en la Comisaría de Centro.
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