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El rapero Maykel “Osorbo” Castillo, integrante del Movimiento San Isidro (MSI), cumple este lunes su sexto día de detención, sin que todavía se conozca el paradero del activista luego de que la policía política lo arrestara el martes pasado.
“Ni rastro de él. Ni una llamada ha hecho a su familia”, denunció en redes sociales la curadora de arte y también activista Anamely Ramos, quien tiene una relación de pareja con el rapero, uno de los cantantes que participa en el tema Patria y Vida junto a Yotuel Romero, Gente de Zona, Descemer Bueno y El Funky.
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“En la propia estación del Cerro negaron varias veces que estuviera allí y cuando Camila (Lobón) fue a Cuba y Chacón después de tres días, no aparece registro de ningún proceso penal abierto contra él, por lo que no tiene razón legal que esté retenido”, dijo Ramos.
“Organismos internacionales como Amnistía ya se han pronunciado por su desaparición. Es un burdo secuestro de la Seguridad del Estado. No vamos a permitir ningún oscuro invento después”, concluyó.
Recientemente, Amnistía Internacional (AI) advirtió que la detención de Maykel Osorbo "podría constituir desaparición forzada". “A más de 72 horas de su detención arbitraria, no aparece en los registros del sistema policial”, alertó.
El rapero contestatario fue detenido el martes por la tarde en su casa mientras estaba almorzando. Varios agentes de la policía llegaron y se lo llevaron sin ni siquiera permitirle vestirse, conduciéndolo sin camisa y sin zapatos.
Por su parte, el Movimiento San Isidro hizo responsable a la dictadura de la integridad física del activista. El Funky también fue arrestado ese día, pero las autoridades lo liberaron casi 24 horas después, bajo la prohibición de salir de su domicilio.
Antes del arresto, Osorbo se mantenía bajo una fuerte vigilancia policial, incluso con agentes instalados en las escuelas de los alrededores de la vivienda del rapero, como bases operativas para seguir sus pasos.
Mientras Osorbo permanece detenido, muchos cubanos se preguntan igualmente por la suerte del activista Luis Manuel Otero Alcántara, líder del MSI, a quien las autoridades lo mantienen internado en el Hospital “Calixto García” en La Habana, pese a intentar demostrar con videos y publicaciones que su estado de salud es bueno, luego de siete días de huelga de hambre y sed contra la represión del Gobierno.
De igual modo, siguen detenidos los seis jóvenes manifestantes que protestaron en la calle Obispo de la capital cubana para romper el cerco policial sostenido alrededor de la vivienda de Otero Alcántara. Estos serían trasladados el fin de semana a prisiones fuera de La Habana, debido a que en varias cárceles de la provincia se detectaron casos de coronavirus.
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