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A pocas horas de conocerse la reducción del 30% en la venta de pan liberado en el mercado estatal de La Habana, la periodista Sonia Sánchez mostró en las redes sociales la aglomeración de personas en una panadería de la capital para poder hacerse con este producto, tan demandado y socorrido en al alimentación del cubano.
Desde su perfil en Facebook Sánchez compartió imágenes de una cola reciente para comprar pan, en la panadería de Loma y Tulipán, en Nuevo Vedado
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"Ahora sí se pone buena la cola del pan", dijo la periodista en alusión a la noticia recientemente anunciada de la reducción en las ventas de pan por falta de harina.
A la publicación le siguieron comentarios como "Miseria humana", "Qué barbaridad!", "¿Menos pan todavía?", entre otros.
El gobierno anunció este lunes la reducción de la oferta diaria de pan liberado en La Habana, que ya comenzó a aplicarse desde el 10 de mayo y se prevé se extienda hasta julio. Las autoridades de la capital indicaron que la disminución de la producción se debe a "las afectaciones en la disponibilidad de harina de trigo".
El pan es un alimento básico para los cubanos. Sin embargo, es insuficiente la oferta, es de mala calidad y ahora se reduce más, a pesar de que subió su precio de 0.5 centavos a 1 peso, con la aprobación de la llamada Tarea Ordenamiento.
La subida del precio del pan y la mala calidad del mismo generaron un estado de opinión pública tan desfavorable en enero, que las autoridades de la capital se vieron obligadas a bajar el precio, mínimamente para algunos productos.
Durante los primeros meses del año ha sido una odisea para los cubanos adquirir pan. En marzo las colas para comprarlo liberado en La Habana podían tomar hasta 2 horas o más.
El déficit de pan y la mala calidad del mismo es un problema que se extiende a otros territorios. En febrero pasado llegaron a reunirse más de un centenar de personas en Gerona, Isla de la Juventud, para comprar pan.
Los cubanos llevan décadas haciendo colas para adquirir un pan, de pésima calidad y caro. El Estado ha sido incapaz de estabilizar la producción y se niega a dejar la venta de este tipo de productos en manos del sector privado.
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