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Efectivos policiales y de la Seguridad del Estado reanudaron este jueves el cerco a la sede de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) en Santiago de Cuba, denunció el líder de esa organización, José Daniel Ferrer.
"Hoy, 22 de abril, la tiranía castrocomunista vuelve a sitiar por completo la Sede Nacional de #UNPACU e impiden el paso de activistas, personas que buscan ayuda y hasta de familiares nuestros. Nuestra respuesta al criminal cerco será pronto. #AbajoLaTiranía", escribió Ferrer en su cuenta de Twitter.
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"La tiranía teme a la creciente afluencia de pueblo hacia nuestra sede", añadió en un tuit posterior. El disidente también informó de "detenciones y retenciones desde el amanecer" y de "cortes de Internet" a los activistas. "Tiranía iracunda y asustada porque no logra con su terrorismo acabar con nuestra labor humanitaria", aseguró.
Poco después, Ferrer divulgó un nuevo mensaje de Twitter informando de la detención de Miraida Martín Calderín.
"Además del nuevo cerco contra la Sede Nacional de la #UNPACU, la tiranía nos mantiene casi incomunicados. Nuestras líneas no tienen servicio de Internet. Estamos usando una vía que cuando la descubran quedamos incomunicados", precisó.
A finales de marzo, el propio Ferrer y varios militantes de la UNPACU se declararon en huelga de hambre para protestar por el cerco policial.
Luego de casi tres semanas, cuando el número de activistas en huelga había llegado a 38 y algunos de ellos empezaron a presentar serios problemas de salud, el cerco fue levantado.
También varios representantes de grupos religiosos visitaron a los activistas, preocupados por su delicado estado de salud.
El 9 de abril, luego que los policías que rodeaban la sede principal de UNPACU en el barrio de Altamira, en Santiago de Cuba, se retiraran tras 26 días de acoso, Ferrer anunció que suspendía gradualmente la huelga de hambre y pidió a los activistas en huelga de hambre en estado crítico que hicieran lo mismo.
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