Un funcionario de la Vivienda en Camagüey aseguró que la entidad no tiene cómo ayudar a una madre cubana que vive con su hijo menor de edad en una casa en peligro de derrumbe.
"La Vivienda no tiene fondos, nosotros no tenemos cómo darte un albergue", dijo el hombre.
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Yamika Díaz, residente en el reparto La Vigía, había pedido ayuda para ella y su hijo luego que un derrumbe parcial en su vivienda destruyera sus pertenencias y el funcionario que la atendió le dijo que no tenía cómo darle un albergue.
"Vivienda no es la que tiene albergues", reiteró el funcionario, aunque le prometió hacer algunas llamadas y gestiones para que su caso se solucione con prontitud.
El domicilio está ubicado en el número 420 de la calle Francisco Agüero y por las imágenes y videos compartidos en internet, habitar allí es prácticamente imposible, algo que Díaz ha denunciado en los últimos siete años.
"Tengo una casa arriba que se está derrumbado y nadie hace nada", escribió la camagüeyana en Facebook con la intención de visibilizar su problema y responsabilizar a las autoridades por la integridad de ella y su familia.
Díaz asegura que hace más de una semana comunicó su situación a algún funcionario local pero no ha obtenido respuesta, y mucho menos ha conseguido una reubicación provisional en algún albergue.
CiberCuba intentó contactar con Yamika Dïaz, para saber si en las últimas horas le habían ofrecido alguna ayuda, aunque sea de manera temporal, pero hasta el momento de redactar esta nota no había respondido a nuestros mensajes.
Hace un año, Iliana Sánchez Hing, alertó que en Camagüey había un edificio en peligro de derrumbe y que las autoridades debían hacer algo para evitar un accidente.
Meses antes se divulgó el caso de una madre con seis hijos que en 2017 fueron afectados por el huracán Irma y desde entonces no tenían donde vivir hasta que la Universidad Ignacio Agramonte, de Camagüey, le facilitó un cuarto a la familia hasta que se resolviera la situación.
La vivienda es uno de los problemas persistentes en Cuba y Camagüey es una de las provincias con mayores demandas y necesidades, según datos oficiales.
En esa provincia el 57 % de las viviendas están calificadas de regular y mal y de todo el fondo habitacional el 76 % están enclavadas en asentamientos urbanos.
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