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La historiadora del arte cubana Carolina Barrero denunció que fue citada por la Seguridad del Estado para comparecer este mismo sábado en una estación de la policía en La Habana.
"La seguridad de estado, encarnada en la figura del primer teniente José Antonio Ramírez Hernández me ha traído esta citación para que comparezca hoy, ante el instructor penal, capitán Gustavo Figueredo Pérez, a las 11.30 de la mañana en la estación de la calle Picota 209 e/ Paula y San Isidro", escribió Carolina en su perfil de Facebook.
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La activista explicó en su publicación en Facebook que la policía política cubana la mantiene vigilada continuamente.
"No podían haber escogido una estación más linda. Ayer, a partir de las 6 de la tarde y hasta la noche, diferentes patrullas pasaron por mi calle como poseídos por la irritación. Son demasiados atropellos de un estado policial", denunció Barrero en sus redes sociales, donde mostró una imagen de la patrulla.
Esta semana Carolina fue detenida arbitrariamente por la Seguridad del Estado, un día después de haber entregado junto a Solveig Font una carta a la Asamblea Nacional en la que se pide la destitución del ministro de Cultura cubano Alpidio Alonso.
La historiadora del arte fue raptada en una patrulla policial, de manera violenta, mientras hablaba con la artista Tania Bruguera, quien calificó el hecho como un horror. La policía política la puso en libertad varias horas más tarde, durante las cuales no se tenían noticias de su paradero.
Barrero contó posteriormente en su cuenta de Facebook que estuvo detenida en la estación de Infanta y Manglar, la misma a la que fue conducida el 27 de enero, junto con el resto de los jóvenes que participaron en la protesta pacífica a las afueras del Ministerio de Cultura.
Este viernes Carolina denunció que la Seguridad del Estado la amenazó con acusarla por un delito de “clandestinidad de impresos” contra el desorden público, contemplado en el artículo 210 del Código Penal Cubano.
Los agentes cubanos de la Seguridad del Estado intentan convertir en delito una impresión sobre papel de una imagen de José Martí cubierto de estrellas, con la que la joven Carolina Barrero quería homenajear el natalicio del Apóstol el pasado 28 de enero.
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