Manifestantes del MINCULT revelan testimonios y evidencias de la golpiza recibida por parte de autoridades cubanas

Algunos manifestantes de los episodios frente a la sede del MINCULT, el pasado miércoles, han revelado evidencias de la golpiza recibida por las fuerzas del orden durante la detención.


Este artículo es de hace 3 años

Varios manifestantes en los sucesos acaecidos frente a la sede del Ministerio de Cultura de Cuba (MINCULT), el pasado miércoles 27 de enero, han revelado a través de las redes sociales y en conversaciones con medios independientes sus testimonios de agresión, así como imágenes que muestran los signos físicos de la golpiza recibida.

Oscar Casanella, quien protagonizara junto a otros activistas la huelga de hambre de Damas 955 el pasado noviembre, mostró evidencia gráfica de los golpes recibidos a consecuencia de las exigencias que un grupo de cubanos realizara frente al MINCULT.


Lo más leído hoy:


A través de una publicación en la red social Facebook, Casanella se refirió a la necesidad de documentar todo el atropello proveniente de la represión policial, motivo que lo impulsó a mostrar los hematomas:

“He amanecido hoy adolorido y con ya visibles hematomas en mi cuerpo de la golpiza que los represores violentos de la policía política cubana me propinó. Yo no quería que mi madre, Georgina Saint-Blancard Morgado, me viera así pero más tarde o temprano se iba a enterar de mi estado”, comenzó la denuncia el Bioquímico y activista político.

Según explica en su post, no solo los funcionarios del MINCULT se abalanzaron contra los manifestantes, también la policía uniformada y otros a su servicio, pero vestidos de civil, violentaron a la veintena de cubanos mientras los obligaban a entrar a un ómnibus para conducirlos luego a una comisaría.

“Tampoco me gusta victimizarme, PERO creo que es muy importante dejar registro y documentar las evidencias que demuestran que este 27 de enero los que nos encontrábamos frente al MINCULT fuimos reprimidos violentamente tanto por el ministro de cultura Alpidio Alonso, por otros funcionarios de dicho ministerio, así como por represores violentos vestidos de civil y sin identificación”.

Asimismo, el también activista y reportero de ADN Cuba, Nelson Julio Álvarez Mairata, mostró en la red social Facebook las magulladuras recibidas por los agentes del orden cuando forcejearon a la entrada del ómnibus. Además, presenta su vestimenta rasgada a consecuencia del episodio de violencia, según asegura Álvarez.

La violencia física por parte de las autoridades cubanas se ha naturalizado ante la actividad opositora. Si en las primeras décadas de la Revolución, así como durante la crisis del Mariel o durante la Primavera Negra, las golpizas constituían el correctivo del poder para mantener el control sobre el descontento popular, al día de hoy, en pleno 2021, el régimen cubano continúa utilizando las mismas herramientas represivas aún cuando son internacionalmente condenadas.

El pasado miércoles, la plataforma feminista Yo Sí Te Creo Cuba denunció las múltiples formas de violencia recibidas por las mujeres presentes en la manifestación. Desde detenciones arbitrarias hasta escenas de agresión física por parte de civiles que decían responder a las fuerzas del Ministerio del Interior pero que no se identificaban oficialmente como tal. La misma plataforma aseguró que, a partir de testimonios de las propias víctimas, estas mujeres fueron obligadas a desnudarse en detención, y sus genitales fueron examinados bajo la sospecha de que escondiesen dispositivos de grabación. Ninguna de las dos víctimas (Camila Lobón y Celia González) ha ofrecido constancia de los hechos, sin embargo, episodios similiares han ocurrido en detenciones a opositoras y periodistas independientes. Todas, mujeres.

Sobre la estancia dentro del ómnibus, mientras eran dirigidos a la estación de policía, el artista plástico e investigador Henry Eric Hernández, declaró para CiberCuba:

“Dentro de la guagua la entrá a golpe que le dieron a Celia, a Camila a Solve, a Miryorly, a Sindy, a Oscar. Si tú levantabas más la mano, bróder, más golpe te daban. Celia tenía a una chamaca, de unos 25 años, vestida del MININT que le daba golpe. Ella gritaba “no somos delincuente”, y luego me preguntaba “¿Henry qué hago?”. Yo le respondía “Celita estate tranquila”, hasta que a la tercera vez la mujer me dijo “vírate pa allá, o le meto”. Yo pensé que era mentira hasta que vi cómo le metía un codazo por el seno izquierdo. Entonces me viré para que no le diera más”, detalla sobre la situación de las mujeres manifestantes.

VER COMENTARIOS (1)

Archivado en:

Lianet Fleites

Periodista cubana. Colabora con la revista El Estornudo y Periodismo de Barrio.


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.1eye.us

+1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada