Funcionarios del estado intentaron prohibir a la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) que diera comida a los necesitados que se acercan cada día a su sede, porque aseguran que se detectó un caso de coronavirus en una de esas personas.
"Todo el que venga aquí va a seguir recibiendo alimentos. El PCR es cuestión de ustedes. Nosotros a todo el que llegue aquí con hambre, ya que el régimen para el que ustedes trabajan no les da alimentos ni los cura debidamente, nos vamos a ocupar de ellos", respondió José Daniel Ferrer.
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La visita de la doctora del consultorio médico y otros funcionarios de salud que no se identificaron se produjo pocas horas después de que Ferrer y su esposa informaran que terminaron la huelga de hambre que sostenían.
José Daniel accedió a ser encuestado y a que se desinfectara su vivienda, pero se negó a cumplir la medida de terminar con la entrega de alimentos que intenta imponerles el Estado.
Ferrer comentó con los funcionarios de Salud Pública que entiende la importancia de la labor de sanidad, pero que muchas veces la Seguridad del Estado utiliza a este organismo para desarrollar sus estrategias de manipulación contra los opositores.
"El sistema médico en Cuba es una gran falsa. Todas las estadísticas mienten. ¿Creen que vamos a creer que pueden hacer una labor efectiva contra el coronavirus que se extiende por el país?", se cuestionó Ferrer ante los funcionarios.
Además aseguró que UNPACU da más medicamentos que Salud Pública en la provincia Santiago de Cuba y que si no aportan más a la sociedad es porque la Seguridad del Estado vive acosándolos y persiguiéndolos.
"No hay un lugar donde se cumplan mejor las medidas sanitarias que aquí" dijo Ferrer a los funcionarios y explicó que desde que se agravó la crisis del coronavirus en Cuba, las personas que van a comer a UNPACU se quedan fuera, separados y esperan hasta que se le dan los alimentos.
"Alimentar a tantas personas en la crisis que estamos viviendo es una tarea bien difícil. Estamos gastando cerca de 300 dólares diarios para alimentarlos. Mi mayor susto no es el coronavirus sino que se me aparezcan mañana en lugar de ciento y pico, 500, o mil. ¿De dónde yo saco para alimentarlos?", dijo Ferrer alertando que la inflación en el país puede llevar a que se cumplan sus mayores temores.
El paciente que resultó positivo por coronavirus en el barrio en que se encuentra la sede de UNPACU es un ciudadano que deambula por toda la ciudad. No se conoce su fuente de infección.
José Daniel Ferrer cerró su mensaje en redes sociales recordando que Santiago de Cuba está en una crisis epidemiológica aguda, pero los funcionarios del Estado están preocupados por la remota posibilidad de que esté el virus en el interior de la sede de UNPACU.
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