El Cuerpo de Guardabosques de Cuba (CGC) pronosticó más de 300 incendios forestales en el primer trimestre de 2021, según reportó la Agencia Cubana de Noticias ACN.
“Aunque los meses de enero y febrero deben aportar menos fuegos que el promedio, el CGC alertó sobre la posibilidad de que los riesgos puedan extenderse hacia el primer trimestre”, explican.
Según la información, los fuegos podrían ser más intensos y propagarse más fácilmente “en correspondencia con la carga de material combustible con que se inician”.
Es por eso que como parte de la XXV campaña nacional de protección contra incendios forestales que realiza la institución, la lucha contra incendios se extenderá hasta el próximo 31 de mayo, cuando se espera el comienzo de la temporada de lluvias en el país.
CGC estimó que la cantidad de fuegos puede alcanzar los 320 de acuerdo a sus cálculos, pues esta cifra es común en una temporada regular, aunque esta está condicionada “por la influencia del evento la Niña-Oscilación del Sur, consistente en un enfriamiento a gran escala de la temperatura de la superficie del océano en las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial”, especifica la nota.
Los guardabosques insistieron en que es necesario continuar el trabajo profiláctico que insiste en la educación y la prevención de incendios en Cooperativas de Producción Agropecuaria y las de Crédito y Servicio, las unidades básicas de producción agropecuaria y los usufructuarios”.
Según las estadísticas resumidas por la ACN, en 2020 ocurrieron 504 incendios, los cuales provocaron daños en 5 343,68 hectáreas, con un promedio daños de 10,60 hectáreas por cada uno de ellos.
Pinar del Río fue la zona más afectada del país en 2020, pues registró 90 incendios del total anterior, que dañaron 709,30 hectáreas de bosques naturales y protegidos. Aunque, Camagüey se llevó el récord de más hectáreas incendiadas con 1655,65 en solo 44 incendios.
De acuerdo a informaciones previas reportadas por nuestro medio, entre las causas más comunes de los incendios están la sequía y las altas temperaturas que azotaron la isla durante el año pasado. A lo que se añade las quemas para diversos fines, la circulación de vehículos sin mata-chispas, pescadores-cazadores furtivos, y fumadores y transeúntes irresponsables.
Entre la década de 2008 a 2017, el país confirmó más de 3900 incendios forestales y 69.300 hectáreas dañadas.
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