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La artista y escritora cubana Coco Fusco cuestionó este miércoles en redes sociales la pasividad mostrada por medios e instituciones en Estados Unidos, ante el acoso del régimen de La Habana al periodista Carlos Manuel Álvarez y la artivista Tania Bruguera.
Fusco recordó que ambos eran de las figuras cubanas más reconocidas fuera de la Isla y han contado con el apoyo de las instituciones estadounidenses, por lo cual estaba siendo “atacados”. Sin embargo, tanto las instituciones como los medios parecían no reaccionar a ello.
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“Esta mañana, la artista cubana Tania Bruguera fue amenazada una vez más por agentes de la Seguridad del Estado por su papel en la reunión del 27 de noviembre entre artistas cubanos y funcionarios estatales. El periodista cubano Carlos Manuel Álvarez, que ha estado informando sobre la huelga de hambre de la semana pasada por El País y el Washington Post, está siendo demonizado en los medios de comunicación del estado cubano”, advirtió.
“Es probable que esto sea un preludio para que se presenten cargos oficiales contra ambos, seguido de arrestos y posible encarcelamiento. Ambos están siendo llamados mercenarios pagados por fundaciones estadounidenses y organismos estatales para desestabilizar la revolución cubana”, señaló.
“Bruguera y Álvarez se encuentran entre los cubanos más conocidos fuera del país y están siendo atacados precisamente porque son conocidos en Estados Unidos, precisamente porque han sido apoyados por las instituciones estadounidenses. Este es ciertamente un problema americano tanto como cubano”, dijo.
“¿Qué más tiene que pasar para que las fundaciones, museos y periódicos estadounidenses que han apoyado a Tania Bruguera y Carlos Manuel Álvarez hablen sobre esta situación? ¿Dónde están todos los conservadores del museo que brotan sobre el trabajo de Tania? ¿Dónde está MoMA? ¿Dónde están los coleccionistas que han comprado? ¿Dónde están los editores que han publicado a Carlos Manuel Álvarez? ¿Dónde están los fundadores que han otorgado a Bruguera y Carlos Manuel Álvarez subvenciones y premios?”, inquirió.
Asimismo, la artista mencionó algunos de los “benefactores” que pudieran pronunciarse sobre el hostigamiento a ambos cubanos. Entre ellos, la Fundación Guggenheim, la Fundación Herb Alpert, el Fondo Rockefeller Brothers, la Fundación Cisneros y la Fundación Meadows, la Fundación Open Society, así como los medios The New York Times, Vice y Greywolf Press.
“¿Dónde están los líderes de Black Lives Matter que dedicaron tiempo a saludar a Fidel por su muerte, pero no dicen nada sobre la brutalidad policial contra artistas negros en Cuba? ¿Por qué los medios progresistas estadounidenses ignoran esto?”, preguntó.
“A todos esos americanos que me llegan con preguntas sobre Cuba que sólo sirven a sus propios intereses personales y profesionales, ¿Cuándo responderán a mis preguntas sobre su silencio acerca de los temas que más importan? No soy el guía turístico que quieres, pero puede que sea el guía turístico que necesitas para poder despertar”, finalizó.
A comienzos de año, Fusco escribió una "Carta abierta a los artistas cubanos", donde reflexionaba sobre las detenciones arbitrarias y acoso a los que se exponen algunos creadores en la Isla. La misiva estaba motivada por el acoso del régimen a Luis Manuel Otero Alcántara, que por esos días había sido arrestado.
“La lista de carreras artísticas que han sido destruidas por los censores es larga. Pero también están los casos infames de artistas que no solo fueron censurados si no también atacados por la Seguridad del Estado, golpeados por la policía, interrogados durante horas, despojados de su membresía en la UNEAC y en la Asociación Hermanos Saíz, de sus licencias para vender su obra, y de sus propios hogares”, escribió.
En 2019, las autoridades cubanas le negaron la entrada a Fusco a la isla, adonde había viajado con el fin de participar en la XIII Bienal de La Habana.
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