El expresidente norteamericano Barack Obama afirmó que no formará parte del equipo de Gobierno de Joe Biden, quien deberá asumir el mando del país en enero, luego de ser proclamado ganador de las elecciones frente a su rival Donald Trump.
En una entrevista con la cadena televisiva CBS, la primera que concede desde el pasado 7 de noviembre, Obama se refirió al impacto que ha tenido su carrera política en su familia, especialmente en la vida de su esposa.
“Hay cosas que no haría porque Michelle me dejaría. Sí, diría: ‘¿Qué? ¿Vas a hacer qué?’”, bromeó.
El exmandatario, quien gobernó Estados Unidos desde 2009 hasta 2017, se refirió al día en que se marchó de la Casa Blanca.
“Cuando se acabó mi presidencia pasaron dos cosas: Una fue, objetivamente, que tenía más tiempo”, relató.
“Pero la segunda, es que (Michelle) pudo dejar algo del estrés que sentía de tener que hacer todo bien todo el tiempo. Yo era observado todo el tiempo”, detalló.
“Sabe, ella respiró aliviada después de estar manteniéndola (la respiración) durante casi diez años en ese punto”, precisó.
Obama recalcó que aunque está dispuesto a colaborar con Biden en su misión, este no lo necesita.
“No necesita mi consejo, y le ayudaré de la manera en que yo pueda. Ahora, no planeo trabajar de repente en el personal de la Casa Blanca o algo así”, expresó.
Acerca de las acusaciones de fraude electoral por parte de Trump y su campaña, así como del apoyo de miembros del Partido Republicano, subrayó que esas alegaciones no tienen ninguna base.
“Joe Biden será el próximo presidente de Estados Unidos. Kamala Harris será la siguiente vicepresidenta. No hay ningún fundamento legal” dijo.
“Y eso ha sido decepcionante, pero ha sido algo normal en estos últimos cuatro años. Obviamente no piensan que hubiera un fraude porque no dijeron nada durante los primeros dos días, pero hay un daño en esto, porque lo que ocurre es que la transición pacífica del poder, la noción de que cualquiera de nosotros que sea elegido para un cargo, tanto si es un rescatador de perros como un presidente, sirve a la gente. Es un trabajo temporal”, agregó.
En su opinión, el hecho de que 72 millones de electores votaran por Trump demuestra que el país está “profundamente dividido”.
“El poder de ese punto de vista alternativo está presente en los medios de comunicación que esos votantes consumen, tiene mucho peso”, señaló.
“Es muy complicado para nuestra democracia funcionar si estamos operando sobre dos bases diferentes de hechos”, añadió.
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