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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó a su rival político, Joe Biden, de ser una “marioneta de Castro”, a solo dos días de las elecciones.
“Biden es una probada marioneta de Castro, Vota por Trump”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter, como parte de su estrategia para ganar la intensa batalla electoral que ambos contrincantes están librando en el estado de Florida.
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Con 29 votos electorales a su favor, e históricamente un estado cuyo voto no está definido, Florida es importantísimo para ganar estas elecciones. Así lo demuestra el pronunciado interés en la región de los dos candidatos, quienes en las últimas dos semanas han visitado el estado en varias ocasiones como parte de su campaña política.
Aunque no puede demostrarse que Biden sea un simpatizante de la dictadura cubana, pues ha repetido en varias ocasiones que no lo es y su historial político lo sitúa siempre al lado de la democracia, la acusación de Trump intenta asegurar las bases del electorado cubanoamericano en el sur de Florida, que en gran parte ha sufrido el exilio y la persecución política por el régimen de La Habana.
La comunidad cubanoamericana es una fuerza política imprescindible en el área. Una parte de ella, integrada también por jóvenes cubanos votantes de reciente llegada al país, ha manifestado su apoyo público y ferviente al mandatario, al exhibir una ideología que mezcla el trumpismo nacionalista con el anticastrismo clásico y el odio al comunismo.
Las acusaciones de comunista, socialista o castrista han sido algunas de las preferidas por Trump para descalificar a sus enemigos políticos.
Varios usuarios cuestionaron la legitimidad de su comentario en Twitter. Un de ellos preguntó: “¿A diferencia de una marioneta de Putin?”, en referencia a las relaciones de admiración que Trump ha manifestado por el líder ruso.
El pasado jueves, en un mitin en el condado de Broward, Biden prometió que de ganar las elecciones cambiará la política hacia Cuba, pues, aseguró, la isla “no está más cerca de la libertad y la democracia que hace cuatro años".
Por otra parte, Trump ha recuperado la política de mano dura de la guerra fría a medida que La Habana ha aumentado la represión ciudadana y se agudiza una crisis económica generalizada en todo el país.
Recientemente, anunció nuevas restricciones que afectarán las remesas familiares a Cuba, una piedra angular de la colapsada economía cubana.
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