El dueño del popular Club Galería Cubaocho, Roberto Ramos, explotó la noche del jueves cuando siete carros de la policía pararon frente al local para ponerle una multa: "Esto es tremendísimo abuso", afirmó.
En un video publicado en Instagram, se ve a Ramos discutiendo acaloradamente con los oficiales, quienes alegaron que habían recibido una denuncia por música alta en el establecimiento.
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Sin embargo, el propietario del emblemático museo-bar de Miami aseguró que en su negocio no había clientes, y que se encontraba solo con un amigo fumándose un tabaco.
"Siete carros de policía en la Calle Ocho, poniendo multicas por fumarme un tabaco solo con un amigo", apuntó.
"Yo que llevo siete meses cerrado, sin pagar renta, sin poder pagar mis biles y muriéndome de hambre, vienen a ponerme una multa por fumarme un tabaco tranquilo y solo en mi negocio", denunció.
"Esto es tremendísimo abuso", señaló Ramos.
Además del cierre, los establecimientos fueron sancionados con $500 dólares de multa, explicó el CEO de Old Havana y Salao a CiberCuba. El empresario asegura que la medida fue arbitraria.
La explicación de la Policía fue que con música alta, las personas tienen necesidad de hablar más alto y es más probable que, si alguno está contagiado, el virus se propague con mayor facilidad.
El Cubaocho estuvo entre los establecimientos que en septiembre abrió como bar desafiando las órdenes del alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez, para evitar el contagio del coronavirus.
Ramos había asegurado que estaba dispuesto a regalar "la croqueta frita" si con eso podía reanudar sus servicios como bar, pues estaba al borde de la quiebra debido a las restricciones de la pandemia.
"Si la ley es poner la croqueta frita en la mesa (restaurant sí, bar no), te pongo la croqueta regalada. Pero voy a abrir porque necesito vender cuadros, necesito pagar renta, pagar mi teléfono...", explicó en esa ocasión el propietario del local, que cuenta con una importante exhibición de pintura cubana y funciona desde hace diez años como galería de arte.
El 13 de octubre Giménez suavizó el toque de queda en el condado de Miami-Dade y dijo que a partir de ese día la medida comenzaría a las 12:00 a.m. y se extendería hasta las 05:00 a.m.
Entre otras medidas de flexibilización que se implementaron en ese territorio del sur de Florida tras la disminución del contagio de COVID-19, estaban algunas relacionadas con el funcionamiento de los parques y otros espacios recreativos, las embarcaciones y los campos de golf; pero persistieron las prohibiciones hacia restaurantes y otros negocios.
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