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Orlando Pérez Isla falleció de camino al hospital tras ser atropellado por un carro del Minint cuando esperaba a que abriera el mercado de Luyanó (10 de Octubre, La Habana). Ocurrió el pasado 2 de agosto, al amanecer. Justo el día que cumplía 53 años, según la versión ofrecida a CiberCuba por familiares de la víctima.
Sobre las 5:00 am del domingo de la semana pasada un carro con matrícula estatal, "con tremenda velocidad", se empotró contra el contén de la acera del mercado de Luyanó, donde Orlando Pérez Isla estaba sentado junto a tres amigos: Ricardo y Lázaro entre ellos.
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Orlando Pérez Isla se había desplazado desde su pueblo, La Salud (Quivicán), porque quería cobrar un dinero que le debían y para no dar más explicaciones dijo a la familia que iba a comprar aguacates.
El conductor del auto que lo atropelló y mató vestía uniforme del Ministerio del Interior, según testigos de lo ocurrido, que no pudieron precisar si lucía los grados de mayor o de teniente, pero afirman que está vinculado laboralmente al Departamento de Logística del Minint. Además, aseguran que mostraba signos de haber consumido alcohol e iba acompañado de tres mujeres.
Tras el atropello, el conductor hizo amago de marcharse del lugar de los hechos, pero entre todos los que a esa hora de la madrugada estaban en el mercado de Luyanó, se lo impidieron, apuntan fuentes familiares.
Los cuatro heridos fueron trasladados al hospital clínico quirúrgico Miguel Enríquez, de Luyanó (10 de Octubre), en el propio carro que los atropelló. Orlando Pérez Isla falleció de camino "aunque el hospital estaba bien cerca". Otros dos sobrevivientes tienen lesiones leves y el tercero "recibió un golpe en la cadera y estará tres meses sin caminar".
La familia ha explicado a CiberCuba que Orlando Pérez Isla falleció debido a que el impacto del vehículo le rompió una costilla y ésta, a su vez, le perforó un pulmón.
A la familia le han dicho que el autor del atropello, estaría ingresado en estos momentos, "con problemas de los nervios".
La prensa local no publicó nada sobre el atropello mortal.
Un velorio vigilado
El mismo domingo 2 de agosto, las autoridades cubanas practicaron la autopsia al cuerpo de Orlando Pérez Isla sin que los peritos pasaran por el mercado de Luyanó a investigar lo sucedido, añaden las mismas fuentes.
La familia está muy dolida porque sólo les dejaron velar el cuerpo durante una hora y media. "Había cuatro oficiales del Minint en el velorio, escuchando todo lo que se hablaba. No pude hablar con mi hermano porque en cuanto cogió el teléfono se le sentaron al lado", recalcan.
Uno de los sobrevivientes del accidente fue al entierro y los agentes del Minint no le perdieron ni pie ni pisada. "El muchacho trató de salir fuera y le siguieron. Cuando se terminó el velorio, se fueron".
Desde el Ministerio del Interior se pusieron en contacto con la familia del fallecido y les ofrecieron ayuda económica para pagar el entierro. "Pensábamos que nos iban a traer el cuerpo envuelto en una bolsa negra, como hacen siempre, y lo trajeron bañado, afeitado y con sábanas blancas".
"Un guajirito"
La familia de Orlando Pérez Isla tiene mucho miedo, pero sobre todo, sospecha que el caso se va a quedar sin investigar. "Él era un guajirito de Habana Campo y lo mataron el mismo día de su cumpleaños", insisten fuentes familiares, a las que sólo les dieron a firmar "un papel".
La familia de Orlando Pérez Isla está destrozada y espera que haya juicio. En una situación similar están los allegados del joven Andy Andreu, de 28 años, fallecido en marzo pasado en la carretera de Camajuaní, tras ser atropellado por un conductor que iba al volante bajo los efectos del alcohol.
Los accidentes de tránsito constituyen una de las principales causas de muerte en Cuba. El estado de las carreteras, la falta de iluminación y la edad y estado técnico de los vehículos contribuyen a aumentar el número de víctimas.
Hace también una semana un hombre murió y otro resultó herido cuando un Gely, de la empresa Cubataxi, intentó esquivar a un camión en el puente La Chorrera, de Arroyo Naranjo (La Habana).
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