Un grupo de libaneses se manifestaron este jueves contra el gobierno por la exploción en Beirut que dejó decenas de muertos y miles de heridos.
Los manifestantes se congregaron cerca del parlamento, en la plaza beirutí de Nejmé, y se enfrentaron con las fuerzas de seguridad libanesas.
Por su parte, los oficiales desplegaron gases lacrimógenos contra los participantes de las protestas, y 16 personas terminaron detenidas en esa jornada.
Según la agencia estatal libanesa de noticias, NNA, varios de los manifestantes han lanzado piedras contra los agentes después de haber prendido fuego con materiales de madera.
La gran explosión en la tarde del martes en Beirut, de acuerdo con las primeras pesquisas del incidente, se debió a la negligencia en el almacenamiento de material altamente explosivo en el puerto de la capital.
El presidente del Líbano dijo este viernes que la investigación examinará si fue causada por una bomba u otra "interferencia externa".
"La causa no ha sido determinada aún. Existe la posibilidad de una interferencia externa a través de un cohete o una bomba u otro acto", dijo el presidente Michel Aoun.
Incluso el gobierno ha dado cuatro días a un comité de investigación para determinar la responsabilidad de la explosión, según dijo a la radio francesa la ministra de Asuntos Exteriores, Charbel Wehbe.
Las autoridades por el momento han dicho que la explosión fue causada por 2.750 toneladas de nitrato de amonio almacenado de manera insegura desde 2013.
El primer ministro libanés, Hassan Diab, cuya esposa e hija resultaron heridas, declaró que no descansará "hasta que encontremos a la persona responsable de lo que sucedió, para responsabilizarlo e imponer las penas más severas".
La información hasta ahora difundida refiere que el fuego se inició en el almacén 9 del puerto para después extenderse al almacén 12, donde se encontraba el nitrato de amonio.
Hasta entonces se cuentan 154 personas fallecidas e 5.000 heridos. No obstante, las autoridades dijeron que se espera que aumente el número de muertos a medida que continúan las operaciones de búsqueda y rescate de las personas desaparecidas debajo de los escombros en áreas cercanas al puerto.
El presidente francés, Emmanuel Macron, visitó Beirut y ofreció el apoyo de Francia ante esta situación, aunque dijo que el Líbano "continuará hundiéndose" a menos que sus líderes lleven a cabo reformas.
Por su parte, Estados Unidos dijo que no se descarta un ataque.
En el caso de Israel, que ha combatido varias guerras contra Líbano, negó haber jugado papel alguno en el incidente.
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