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La Policía de Ginebra retiró al científico cubano Ariel Ruiz Urquiola de los alrededores de la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas donde hacía una huelga de hambre y sed por sus derechos a ser escuchado como víctima de la dictadura cubana.
La activista Yaima Marín Díaz, quien está realizando “guardia ciudadana” junto a Urquiola, aseguró a CiberCuba que la Policía local dio la orden de retirar al biólogo del lugar y le prohibieron permanecer allí.
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También relató que el biólogo cubano estaba situado al lado de una guardería y al parecer el director de ese lugar llamó a la Policía, quien además le quitó a Ariel la pancarta con la que acompañaba su huelga pacífica.
En estos momentos, según Marín Díaz, Urquiola se encuentra en un lugar alejado del frente de la guardería y de las oficinas donde estuvo ayer. La policía dijo que normalmente ahora no debía tener ningún problema.
El científico se mantiene meditando y esperando una respuesta por parte de la organización de Naciones Unidas.
Este lunes Ariel Ruiz Urquiola inició su protesta pacífica y dijo en una carta dirigida al Consejo de Derechos Humanos de la ONU: "Mi único objetivo es que se me respete mi derecho a ser oído sin intermediarios en plenaria como víctima de crimen de lesa humanidad de tortura por parte de la dictadura cubana, cuyo “gobierno” ha sido reconocido como miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU desde su creación en el 2006".
También dijo que esperaría frente a la institución pública con sede en el palacio de Wilson, Ginebra, la oportunidad para ser escuchado.
En la misiva el científico denuncia que la dictadura le inoculó una cepa del VIH, y le dio placebo en lugar de inmunoterapia a su hermana Omara Ruiz Urquiola, paciente de un carcinoma ductal infiltrante bilateral de mamas HER2+++.
"Yo no estoy aquí para demandar a su gobierno, sino únicamente para exponer nuestros casos en sendas presentaciones ante los ciudadanos que aún creen en la ONU usando su plataforma plenaria", sostuvo.
Por su parte, Yaima Marín Díaz dijo que en la sede de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU inicialmente no tenían la información de que Ariel estaba en huelga de hambre y sed.
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