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Cuba suspendió todos los eventos deportivos hasta el próximo 30 de abril, como medida frente al brote internacional de coronavirus que este miércoles ocasionó la primera muerte en la Isla.
En un comunicado emitido por el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) se informó que no serían desarrollados los eventos nacionales pactados hasta la fecha referida.
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Según el diario deportivo JIT, el organismo ha considerado oportuna esta medida, que se suma a la de posponer los certámenes con participación extranjera programados para ese mismo período, anunciada el pasado día 14.
“El Inder reitera que ha restringido a su máxima expresión las salidas de delegaciones cubanas al extranjero, limitando las evaluaciones a las directamente vinculadas a los procesos de clasificación olímpica y paralímpica, respaldadas por sus federaciones internacionales y el panorama imperante en sus naciones sedes”, explica la publicación.
Por el momento, quedan suspendidos encuentros internacionales como el torneo de bádminton Giraldilla, que debía efectuarse del 13 al 17 de marzo; la II Copa Amistad Cuba-Australia de rugby, del 20 al 27 de este mes; un partido de FIFA contra Nicaragua, el 25 de marzo; la Media Maratón de Varadero, el 29 de marzo, y el Torneo del Caribe de tenis de mesa, del 2 al 8 de abril.
La medida se suma además a otra establecida por el organismo, de que en los próximos días solo podrán viajar al extranjero los atletas que tengan planificado participar en torneos preolímpicos que aún no han sido cancelados, con el objetivo de evitar el contagio por el COVID-19 tanto a deportistas como a entrenadores.
El pasado viernes, Pablo Castillo, director del Instituto de Medicina Deportiva, informó que hasta el momento no se ha reportado ningún positivo al coronavirus dentro del grupo de cubanos que están compitiendo fuera de la Isla, ni tampoco entre los colaboradores internacionales del sector.
Sin embargo, el país no ha podido evitar que el brote ingresara, despertando rápidamente inquietud entre muchos cubanos, dentro y fuera del archipiélago.
Las autoridades cubanas confirmaron la primera muerte por coronavirus en horas recientes, además de reconocer que ascendieron a 10 los pacientes infectados por el COVID-19.
Se trata de uno de los tres italianos que fueron los primeros casos positivos reportados. El fallecido era un hombre de 61 años, que llevaba unos días ingresado en la sala de terapia intensiva del Instituto de Medicina Tropical “Pedro Kouri” en estado crítico.
Uno de los tres últimos casos identificados es un ciudadano cubano de 25 años de edad, residente en el municipio Santa Clara, que llegó al país el 8 de marzo procedente de Madrid. También hay una ciudadana cubana de 67 años de edad, residente también en el municipio Santa Clara, quien arribó a Cuba el 11 de marzo en un vuelo desde New Jersey, Estados Unidos.
El régimen cubano, no obstante, sigue negando la necesidad de poner en marcha una cuarentena porque "no hay transmisión" de esta enfermedad.
"Transmisión es cuando empecemos a encontrar personas que le logremos diagnosticar la presencia del virus -con o sin síntomas- y no haya tenido relación con una persona que haya venido infectada como tal. Ahí sí podremos hablar que hay una transmisión de la enfermedad", explicó el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
A pesar de la compleja situación internacional, la Aduana de Cuba sostiene que no es imprescindible establecer el cierre de las fronteras del país ante la amenaza de coronavirus, que ya ha provocado más de 140.000 contagios, reconocidos, en todo el mundo.
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