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El artista independiente cubano Luis Manuel Otero Alcántara, que fue detenido este domingo en La Habana, se encuentra en el centro de procesamiento para detenidos, conocido como el Vivac, en espera de un juicio sumario abreviado por daños a la propiedad.
La noticia, compartida en la página de Facebook del Movimiento San Isidro, asegura que la información fue confirmada por una oficial con número de placa 10836, con grados de Mayor, que buscó el caso en la red del sistema policial.
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El juicio debe realizarse, según el ordenamiento jurídico vigente, antes de que transcurran 10 días desde la fecha del arresto.
Otero Alcántara fue arrestado para evitar que acudiera a la manifestación frente al Instituto Cubano de Radio y Televisión por la censura de un beso gay en la película Love, Simón. En el momento de su detención, su novia Claudia Genlui fue golpeada por una agente de policía en el medio de la calle por intentar documentar el arresto.
De acuerdo con el testimonio de la curadora de arte, a través de una directa en su cuenta de Facebook, los efectivos se llevaron a Luis Manuel e intentaron arrebatarle su teléfono celular para que no grabara la detención. Como ella no accedió a entregarlo, una mujer la tiró al suelo en la calle San Isidro, la golpeó y se llevó el teléfono a la fuerza.
"Recordamos que el uso de la fuerza represiva innecesaria, la arbitrariedad policial, el abuso físico sobre los ciudadanos indefensos y la puesta en práctica de figuras legales arbitrarias, puede ser considerada como terrorismo de estado, y como tal ser entendida por los organismos internacionales y los estados soberanos nacionales", se lee en el comunicado del Movimiento San Isidro.
Luis Manuel Otero Alcántara ha sido acusado anteriormente de desacato agravado y ultraje a los símbolos patrios, delitos que no tienen el peso suficiente para poder justificar un juicio en su contra y buscar su encarcelamiento.
La noticia de su juicio llega pocos días después del juicio en Santiago de Cuba de José Daniel Ferrer, quien se encuentra en prisión desde el pasado 1 de octubre, junto a los activistas Fernando González Vaillant, Roilán Zárraga Ferrer y José Pupo Chaveco, todos integrantes de la UNPACU. Durante todo su arresto, el régimen cubano se ha enfocado en una intensa campaña propagandística de descrédito contra el líder opositor y busca encarcelarlo por nueve años.
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