Xavi Hernández, quien hasta hace poco fuera el principal aspirante a relevar a Ernesto Valverde en el banquillo azulgrana, puso un grupo de exigencias que terminaron frenando las negociaciones y allanando el camino para el arribo de Quique Setién.
Cuando Eric Abidal y Òscar Grau, secretario técnico y CEO de la entidad culé, se reunieron con el otrora estelar mediocampista, este puso como condición básica que su incorporación no se produciría en enero, sino en junio próximo.
Según la Cadena SER, también solicitó disponer del máximo control del área deportiva y el fútbol base; la incorporación de su excompañero Carles Puyol; y las contrataciones de Joan Vilà -su padre deportivo-, Jordi Cruyff y su hermano Óscar, al que quería a su lado en el cuerpo de dirección.
Por último, pidió revolucionar los servicios médicos del club, toda vez que le interesaba reemplazar a su actual jefe.
La fuente referida señaló que cuando el presidente Josep Maria Bartomeu fue puesto al tanto de tal situación, no lo pensó dos veces para cerrarle la puerta a la posibilidad de hacerse con los servicios del técnico del Al-Sadd catarí, pues quería un entrenador que se incorporase de forma inmediata.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: