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Mientras el pueblo cubano consume cada vez menos pescados y mariscos, la industria pesquera del país se enfoca en exportar no solo cada cola de langosta capturada, sino también ahora las magras producciones de agua dulce.
En momentos en que las pescaderías de Villa Clara se caracterizan por una vergonzosa orfandad de ofertas, los acuicultores de la provincia tienen como prioridad para este 2020 la identificación y elevación de sus renglones exportables, y para ello buscan priorizar la cría y desarrollo de aquellas especies que reportan mayor aporte en divisas extranjeras a las arcas del gobierno.
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Así lo declaró la emisora radial santaclareña CMHW, tras entrevistar a René Peña Carrazana, director general de la empresa PESCAVILLA, entidad que en este 2020 comienza a poner en práctica un grupo de experiencias productivas, para contribuir a la exportación.
“La búsqueda de nuevos horizontes exportables abre los caminos para una acuicultura villaclareña sustentable, explicó el directivo, quien no precisó, sin embargo, a qué se debe la profunda y continuada escasez de ofertas en las 26 pescaderías del territorio, popularmente conocidas como “pescavillas”.
El directivo prefirió centrarse en las grandes exceptivas que ahora mismo existen en torno a la producción de especies de agua dulce y lo que estas pudieran representar dada la buena aceptación con que cuentan en el mercado extranjero.
“En ese programa está la cría de la langosta de agua dulce y la introducción de la angula, conocida popularmente como anguila, que, por su sabor exquisito, textura y valor nutricional, lo convierten en un alimento deseado y con propiedades oportunas para el envío a otras naciones”, puntualizó en su reporte la emisora CMHW.
Pero mientras los directivos se enfocan en el mercado extranjero la mesa del cubano está desprovista de peces e incluso de aquellas elaboraciones que eran habituales hace un par de años atrás.
“Aquí ya no venden ni claria, ni picadillo, ni croquetas. Pero cada vez que viene el presidente o algún ministro los llevan y les muestran medio centenar de productos que supuestamente se les ofertan al pueblo de manera habitual, pero que solo vemos ese día en el noticiero”, se queja un señor de más de sesenta años, y visiblemente ofendido ante la única oferta del establecimiento ubicado en la esquina entre Martí y Esquerra, de la ciudad de Santa Clara: “Revistas “Mar y Pesca”.
Cibercuba denunció una situación similar a mediados de 2019 cuando un trabajador de la pescadería ubicada en las inmediaciones del estadio Sandino confirmó que las ventas registradas hasta ese momento del año constituían el 60% de las registradas en 2018.
El 8 de abril 2019, tras la publicación de un elogioso artículo en las páginas del periódico villaclareño Vanguardia, no pocos lectores hicieron saber su descontento en la web del referido medio, y algunos se quejaron también de que en ese momento solo se ofertaba picadillo de pescado y Revistas Mar y Pesca.
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