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A solo cuatro meses la reapertura del complejo gastronómico La Minerva, los administradores de esta entidad estatal fueron depuestos, mientras que los dependientes aguardan las “rigurosas sanciones” que ha prometido la dirección provincial de comercio en Villa Clara.
Tras las reiteradas denuncias y el malestar de los clientes con el servicio brindado, el propio presidente del gobierno en el territorio Alberto López orientó a los inspectores de la Dirección Estatal de Comercio que examinaran el complejo gastronómico, según información publicada por la emisora santaclareña CMHW.
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Pareciera que fue ayer cuando el periódico Granma hablaba de las bondades y luces de esa entidad reabierta con motivo del 26 de julio y que costó a las arcas públicas 1 millón 200 mil pesos. Sin embargo, los inspectores detectaron un grupo considerable de irregularidades que han sido calificadas ahora como “engaño al consumidor”.
“La norma oficial del pescado era de 292 gramos, y detectamos raciones donde faltaban hasta 97 gramos. De modo que, al momento de la inspección se tenía un excedente de 27 raciones por un monto de 432 pesos de estafa, lo cual constituye un engaño muy fuerte al consumidor”, citó como ejemplo Eyigsi Cueto, directora de Comercio Estatal en Villa Clara.
De la misma manera refirió que se encontraron productos escondidos tras el mostrador sin expenderlos a los clientes, como fue el caso del refresco TuKola, que no se exhibía en el área de venta.
“También detectamos productos introducidos de manera ilegal para la elaboración de tragos, como cubalibres, limonadas, piñas coladas, mojitos y sangrías que se cobraban a 20 o 25 pesos sin que constituyeran ofertas de la propia unidad”, precisó Cueto.
Solamente el día de la pesquisa se detectó un faltante en caja ascendente a 400 pesos. Algo inexplicable si se tiene en cuenta que el proceder habitual era la adulteración por exceso de los precios establecidos en el menú.
“El entremés de jamón y queso que se ofertaba a 25 pesos, tenía un precio oficial de 6.55 pesos, y el día de la inspección ya se habían vendido 35 raciones a los clientes”, indicó la directiva.
Lamentó igualmente que se hayan detectado tales irregularidades en una entidad modelo: “Era una unidad sobre la que existían expectativas de primer nivel, y se esperaba que se destacara por su buen servicio al pueblo”, concluyó.
Por su parte Beatriz Garí Chavez, directora de la Empresa de Aseguramiento al Comercio Interior en Villa Clara, entidad a cargo del Complejo Gastronómico Presa Minerva declaró que apenas se detectaron las violaciones se procedió a la sustitución del administrador.
“Los demás implicados serán sancionados con medidas severas según la Resolución 54 sobre la Protección al Consumidor, pero hemos decidido sustituir a toda la dirección del centro, y designar como nuevo director al jefe de mi unidad empresarial de base de servicios gastronómicos”.
Calificó de bochornoso todo cuanto se detectó en el Complejo Presa Minerva, un centro reinaugurado por las máximas autoridades políticas del territorio en el mes de julio pasado, y que fue presentado como la principal obra social de la provincia en homenaje al Asalto al Cuartel Moncada.
“Esto es vergonzoso para el sector del comercio interior de nuestra provincia, cuando hemos trabajado tanto a favor del respeto al consumidor, quien además siempre tiene la razón”, precisó la directiva.
En los últimos años la provincia de Villa Clara exhibe los resultados más destacados y estables del país en la esfera del Comercio Interior, de modo que lo sucedido pudiera constituir un medidor fiable de cómo andan los demás territorios de la isla.
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