Aunque no se haya oficializado, la relación entre la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) y el Instituto Universitario de la Danza Alicia Alonso termina después de 18 años, al no alcanzar un acuerdo sobre la naturaleza de la adscripción del centro, informa EFE.
El Instituto es una denominación específica de la Fundación de la Danza "Alicia Alonso", que se agrega a la Universidad Rey Juan Carlos. Ostenta, igualmente, la Presidencia del Comité Internacional de la Danza/UNESCO.
La URJC le aporta anualmente, además de sus instalaciones, cerca de un millón de euros para que asuma la formación práctica -más del 80% de la carga lectiva- de los matriculados en los estudios de grado, 267 en este curso.
Por su lado, Alicia Alonso ha dicho estar “consternada” ante la decisión de Javier Ramos, rector de la URJC, quien puso fin a la alianza.
“Se me informa de que la posición del actual rector de la Universidad (…) es un factor determinante en la crisis”, algo “muy injusto” después de “tantos años” de “esfuerzo y trabajo”, dijo Alonso.
Por su lado, Fernando García Muiña, el vicerrector de Ordenación Académica de la URJC, explicó que en 2015 se había formalizado con el Instituto una encomienda de gestión, es decir, la subcontratación de las enseñanzas, que no es posible mantener “en el actual marco normativo”.
“Ha sido una relación positiva hasta ahora pero falta flexibilidad y conocimiento de la situación. Estamos negociando con ellos cuando salen y aunque no me atrevo a dar una fecha será en las próximas semanas”, agregó el vicerrector, quien ha insistido en que no se van a abonar al Instituto los 960.000 euros que reclaman.
El Alicia Alonso no ha dejado de impartir clases de momento, según refiere su director, Alberto García, ya que el convenio está vigente para el curso 2019/20. Sin embargo, la URJC no ha hecho los pagos necesarios y con la falta de fondos tendrán que despedir a los profesores contratados.
García afirma que todo el conflicto se debe a una actitud de la universidad de “asumir un modelo mercantil, que les exige pagar sus instalaciones por186.000 euros, y el 50% de las matrículas, que son tasas públicas. “Un alumno cuesta 6800 euros y pagan de matrícula 1280. Se supone que la diferencia es lo que financian los Presupuestos Generales del Estado”, afirmó.
A sus casi 99 años de edad, Alicia Alonso, la Prima Ballerina Assoluta del Ballet Nacional de Cuba (BNC), es especialmente recordada por sus representaciones, entre ellas, las de Giselle y Carmen. Nació en La Habana en 1920 y mantuvo relaciones estrechas con el gobierno de los Castro.
Se prevé que quien lleve en el futuro el mando del BNC sea la reconocida Viengsay Valdés, que desde enero funge como subdirectora de esa institución.
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