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Las declaraciones del canciller cubano, Bruno Rodríguez, cuando le preguntaron por la "justificación" del Gobierno para impedir viajar a un grupo de cubanos al extranjero, ha despertado indignación entre los “regulados”.
Varios periodistas con prohibición de viajes al exterior calificaron este jueves de vergonzosas las palabras del ministro de Exteriores durante la entrevista con Associated Press. Rodríguez dijo que no sabía, que había que analizar "caso por caso", y añadió que las leyes migratorias cubanas son "muy similares a las de cualquier país".
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El periodista independiente, Manuel Alejandro León, ha dicho este jueves -en declaraciones para Radio Televisión Martí- que las leyes que existen no aplican en sus casos, porque ellos no están "sujetos a procesos penales", ni mucho menos son "funcionarios".
En opinión de Henry Constantín, director de la revista camagüeyana La Hora de Cuba, Bruno Rodríguez escogió "mentir para evadir reconocer los delitos del gobierno que representa”.
Boris González Arenas, por su parte, comentó que su caso es conocido en las más altas instancias del Gobierno, y que no entiende cómo pueden "llegar a decir algo así y seguir tan tranquilos".
Alejandro Tur Valladares concluyó que se trata de la típica "distorsión de la realidad" por parte de los funcionarios del estado.
Para la periodista de Sancti Spíritus, Aimara Peña González, la respuesta de Rodríguez evidencia la "complicidad" de los dirigentes con esas violaciones. "Creo que miente descaradamente porque nosotros hemos tomado acciones dentro del marco legal para hacer presión al gobierno y que se levanten las regulaciones", dijo.
“No lo sé, habría que conocer caso por caso", fue la respuesta exacta dada por el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba en entrevista para The Associated Press, ante la pregunta sobre la "justificación" para que haya personas "reguladas".
"Las regulaciones migratorias cubanas son muy similares a las de cualquier país y cualquier política migratoria moderna, que establecen toda una serie de figuras en ley que restringen la salida del país a personas que conocen información clasificada, es decir, cargos anteriores en el gobierno, etcétera, a personas que están sometidas a procesos judiciales, en fin hay toda una serie de figuras que están reguladas en la ley”, añadió Rodríguez.
Su respuesta eludió la queja de los cubanos "regulados" por el Gobierno que afirman no encajar en ninguno de los supuestos de esas "regulaciones migratorias" referidas por el canciller.
Desde hace meses, una creciente cifra de "regulados" en Cuba viene insistiendo en que no existe ley en la nueva Constitución cubana que ampare el impedimento de salir del país tal como se les ha aplicado a ellos.
El Instituto Patmos, que documenta el número de personas en esa situación en Cuba, ha indicado que desde el 2012 existe en Cuba la figura del "regulado", pero en principio esa categoría solo sería aplicable a altos dirigentes, universitarios vinculados a programas estratégicos y funcionarios relacionados con actividades de primer orden en materia de desarrollo económico y científico del país.
Sin embargo, en los últimos años esa categoría se ha empleado de forma recurrente para bloquear la salida de Cuba a activistas críticos con el Gobierno cubano, con el objetivo de que no puedan dar a conocer en el exterior su versión de la vida política y civil en la Isla, según insisten en afirmar los perjudicados.
Varios son los casos denunciados en los cuales las autoridades aduaneras cubanas niegan la salida del país sin darles a los afectados ninguna explicación convincente de las razones para esa determinación.
Ya son 194 los cubanos que figuran oficialmente como "regulados", según informó este mismo jueves el Instituto Patmos.
Mientras tanto, el opositor Guillermo del Sol cumple 53 días en huelga de hambre para exigir al Gobierno de la Isla la eliminación de esa categoría, que vulnera los derechos humanos.
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