El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, aseguró este martes que ya ha llegado el momento de que Nicolás Maduro deje el poder en Venezuela.
"Estados Unidos y más de 50 países consideran que ha llegado la hora de que Maduro deje el poder", aseguró en una rueda de prensa conjunta con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov. Más tarde también se reunió con el presidente ruso, Vladimir Putin.
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Ambos se reunieron en la localidad rusa de Sochi, en el Mar Negro, donde el representante del Kremlin pidió dejar atrás años de "desconfianzas" entre Washington y Moscú.
Pompeo también instó al gobierno ruso a que deje de apoyar a Maduro y mostró la oposición de Estados Unidos a que cualquier país interfiera en los asuntos de la nación petrolera.
"Esperamos que el apoyo ruso a Maduro se termine", indicó.
En este sentido Lavrov contestó que "no se puede instaurar una democracia por la fuerza".
Más allá de la crisis venezolana, las relaciones entre ambos países se han visto afectadas por denuncias -negadas por Moscú- que apuntan a que Rusia intentó influir en los resultados de la elección presidencial de Estados Unidos en 2016 y por diferencias en la forma de abordar los conflictos en Venezuela, Irán, Siria y Ucrania.
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