El Servicio Nacional de Migración de Panamá ha informado este martes que en el primer cuatrimestre del año han sido detenidos por diversas razones más 560 extranjeros.
De esa cifra, un total de 171 personas son cubanos, siendo esta la mayor representación de detenidos. El resto proceden de Colombia, Venezuela, Nicaragua y El Salvador.
El rango de edad oscila entre los 25 y 31 años y de los más de 560 detenidos 445 son hombres.
Según la agencia EFE “la principal causa de retenciones fue por tener un estatus irregular con 314 personas, 91 que permanecían en el país con estadía vencida, 56 extranjeros que fueron retenidos por razones de seguridad, 38 que están en etapa de investigación o verificación, otros 35 por trabajar sin permiso para permanecer en el país, 26 involucrados en faltas administrativas y 3 con otras faltas”.
En abril último las autoridades del Servicio Nacional de Fronteras en Panamá habían dado a conocer que más de 2.300 migrantes –que pretenden llegar a Estados Unidos– se encuentran distribuidos en tres puntos del país. Es así como están sometidos a un proceso de verificación, que una vez terminado les permitirá salir de manera ordenada del país.
Según EFE la llegada incesante de migrantes llevó a Panamá y Costa Rica a aplicar de manera conjunta un programa llamado "flujo controlado". Se trata de un proceso de verificación sanitaria y también biométrico, para comparar información con bases de datos de Estados Unidos y otros países a fin de tener un perfil de estas personas y determinar si generan o no un alerta migratoria.
Según datos ofrecidos por esa misma agencia panameña, a inicios de marzo de este año un total de 62 cubanos habían sido expulsados del país por tener el período de estancia vencido, haber cometido faltas administrativas o cumplir pena por delito doloso, entre otras razones.
Desde el 2018 este país centroamericano ya consideraba a Cuba como uno de los cinco países con mayor cantidad de deportados por las autoridades migratorias.
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